Un niño de diez años y cuya identidad responde a las iniciales D. G. D. ha resultado herido grave a primera hora de la tarde de hoy al ser mordido por una víbora en Colunga. Al parecer en el momento de los hechos el niño se encontraba bajando el picu Pienzu, en la cordillera del Sueve, en compañía de su padre. La familia, natural de Madrid, veranea habitualmente en Asturias.

Después de recibir una primera asistencia médica en Colunga el menor tuvo que ser trasladado en un primer momento al hospital de Cabueñes y posteriormente al HUCA. Al parecer y según fuentes conocedoras del suceso, la víbora mordió al pequeño en una mano. Era una serpiente de pequeño tamaño de la que el padre del niño tomó una fotografía. El pequeño pudo ir con su padre al centro de salud de Colunga.

"Está estable, con tratamiento y en observación, a la espera de evolución", señalaron a última hora de la tarde fuentes médicas del Hospital Universitario Central de Asturias en conversación con este periódico. Al ser una víbora de pequeño tamaño los médicos confían en que la cantidad de veneno inoculado en el menor no fuera muy grande. "A priori, no parece que le haya producido una toxicidad sistémica, pero conviene vigilar la evolución", señalaron las citadas fuentes, según las cuales es la tercera mordedura de víbora que atienden en el HUCA en lo que va de semana. Lo más habitual es que una mordedura de este tipo produzca algunos problemas locales de inflamación. Por el momento, no los presenta.

Durante el verano las salidas al campo hacen que aumenten las mordeduras de víboras en Asturias. Sólo el 1 por ciento de las mordedoras son mortales.