La violencia juvenil comienza a alcanzar cotas de preocupación. No digamos si esta se lleva a cabo sobre su propia familia, algo que cada día se convierte en habitual.

El pasado viernes, agentes de la Policía Local de La Laguna tuvieron que actuar para evitar que un menor de 17 años continuase agrediendo a su madre, en el interior de un domicilio en el citado municipio. Los hechos que nos ocupan comenzaron sobre las 14:00 horas cuando la madre del menor, una mujer a punto de cumplir los 48 años, solicitaba el auxilio policial puesto que según indicó a los agentes "había tenido una discusión con su hijo ya que el mismo estaba consumiendo hachís en la vivienda por lo que le llamó la atención y, tras una discusión éste acabó dándole una patada en el muslo procediendo la misma a defenderse de la agresión". Además, la progenitora relató a los agentes que el menor le había deseado la muerte y para ello llegó a amenazarla con matarla.

Cuando los funcionarios policiales llegaron al domicilio la mujer tenía que ir a buscar a otro hijo, por lo que esperaron a que bajase el supuesto autor de la agresión, el cual manifestó que si es cierto que discutió con su madre ya que no le deja consumir hachís dentro del domicilio y que, tras la disputa este la había lanzado una tapa de algo, devolviéndosela y arrojándosela a la cara al tiempo que le propinaba una patada en la pierna. Los policías locales recogieron el testimonio de un hermano del joven, de 14 años, quien agregó que "es habitual que su hermano agreda a su madre, así como las discusiones frecuentes, por culpa del adolescente". El joven fue detenido y conducido a un centro de salud y de ahí a los calabozos de la Comisaría de la Policía Nacional, para ser puesto a disposición de la Fiscalía de Menores.