El Supremo mantiene las penas dictadas por la Audiencia de Madrid contra los acusados por las cinco muertes de la avalancha del Madrid Arena, la noche de Halloween de 2012, y añade una condena de año y medio de prisión para el doctor Simón Viñals, que había sido absuelto en el juicio que finalizó en mayo de 2016. Los familiares de las víctimas han acogido con ambivalencia esta esperada sentencia. El padre de Katia Esteban, la víctima de origen gijonés, se ha mostrado resignado, aunque también ha indicado que sería un buen momento para exigir responsabilidades políticas y revisar el Código Penal para endurecer las penas por imprudencia. La ovetense María José Siñeriz, letrada de la familia de Cristina Arce, otra de las víctimas, se ha mostrado satisfecha con la condena de Viñals y ha manifestado que pedirá el ingreso en prisión. El fallo mantiene la absolución de Carlos Viñals, hijo del anterior.

"Es lo que hay, poco se puede alegar, tenemos la Justicia que tenemos", indicó Ángel María Esteban, padre de Katia. "Básicamente, el fallo recoge lo que dijo la Audiencia. Condena a un médico, pero deja al otro. No hay ningún político condenado. Quizá podría hacerse ahora una comisión de investigación y depurar responsabilidades políticas, que es evidente que las hubo. Ahí había una mafia de favores y ventajas, como ha quedado demostrado", indicó. Esteban añadió que quizá sea el momento "de endurecer las penas previstas para los delitos de imprudencia grave como ha sido este caso".

Los cuatro años de prisión que se han impuesto al empresario Miguel Ángel Flores le saben a poco. La Sala de lo Penal del Supremo ha confirmado la condena a Flores, presidente de Diviertt y promotor de la fiesta de Halloween, como autor responsable de cinco delitos de homicidio y catorce de lesiones por imprudencia grave. Además, le inhabilita para cualquier actividad en relación con la organización y celebración de eventos durante el tiempo de la condena.

También ha confirmado tres años de prisión por los mismos delitos a Francisco del Amo, responsable de Madrid Espacios y Congresos (Madridec), y Santiago Rojo, director general de Diviertt; dos años y seis meses de prisión a Miguel Ángel Morcillo, jefe de personal de Diviertt, y a Carlos Manzanares, socio de Kontrol 34 (encargada del acceso al recinto), así como el pago de una multa de 3.600 euros a los coordinadores de Seguridad de Seguriber, Juan José París y Raúl Monterde.

Los más novedoso de la sentencia es que la Sala anula la absolución del médico Simón Viñals, encargado de atender y dirigir el servicio médico la noche de los hechos, y le condena a un año y medio por imprudencia grave con resultado de muerte, en la modalidad de imprudencia profesional, en relación a la víctima Cristina Arce. Además, no podrá ejercer durante cuatro años. Además, tendrá que indemnizar a los familiares de Cristina Arce en 340.000 euros. La sentencia indica que "incrementó el riesgo" de que la joven falleciese, al no reanimarla.

La familia de Cristina Arce celebró la sentencia que ha condenado a un año y medio de cárcel al doctor Simón Viñals por imprudencia en la atención médica de la joven. "No podía quedar sin condena una negligencia", indicó la abogada de la familia, la ovetense María José Siñeriz, quien calificó la sentencia de "sensata", frente a las críticas a la resolución que ha realizado el letrado de Miguel Ángel Flores, empresario encargado de la fiesta en el recinto.

"Los argumentos del Supremo son perfectamente lógicos, y ha entendido los nuestros", explicó la letrada asturiana. "Respeta muy bien los hechos probados", añadió. En cuanto a la pena impuesta al doctor, indicó que "lo importante era la condena en sí". "No pretendíamos una pena de más o menos años, no tenemos nada que opinar sobre el año y medio de cárcel", comentó. Y añadió que tienen "la obligación" de pedir la entrada de Viñals en prisión.