Un hombre de mediana edad falleció ayer en las laderas del puerto del Palo, en Allande mientras cubría una etapa del Camino de Santiago. El fallecido iba acompañado de su pareja cuando, todo hace indicar, se sintió indispuesto y se desplomó. Eran aproximadamente las once de la mañana, con bien tiempo y ausencia de calor. Un día perfecto para caminar que, sin embargo, acabó en tragedia.

El Grupo de Rescate de Bomberos del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), a bordo del helicóptero medicalizado del organismo autónomo, acudió a la zona para atender y evacuar al hombre, pero no se pudo hacer nada para salvar su vida.

Se sabe que la pareja de peregrinos había estado alojada un par de días en un conocido local hotelero de Pola de Allande. Ayer por la mañana se pusieron en marcha para realizar una de las etapas del Camino Primitivo, probablemente con intención de llegar y pernoctar en la localidad de Berducedo.

Son algo más de 18 kilómetros de trayecto duro, sobre todo por las dificultades que plantea el puerto del Palo, que sirve de frontera a los concejos de Allande y Grandas de Salime.

El Centro de Coordinación de Emergencias recibió el aviso a las doce menos cuarto del mediodía. En la llamada se decía que la pareja se encontraba ya en el alto del puerto del Palo, a unos 500 metros de la carretera.

Tras movilizar el helicóptero medicalizado, el equipo de rescate llegó al lugar de los hechos y comprobó que el hombre, del que las autoridades no quisieron ayer facilitar filiación pero que se sabe que era español, estaba ya siendo atendido por el equipo médico de atención primaria de Allande, activado por el SAMU, que le estaba practicando maniobras de reanimación cardiopulmonar básica.

El médico de servicio, junto a los bomberos-rescatadores del equipo de Emergencias, continuaron con la atención intensiva durante varios minutos. Para ello procedieron a la intubación del peregrino y ejecutaron maniobras de reanimación cardiopulmonar avanzada. Pero todo resultó inútil.

La Guardia Civil se hizo, finalmente, cargo de los trámites necesarios para el levantamiento del cadáver.