Un choque entre dos turismos ocurrido ayer en la Autovía del Cantábrico en dirección Galicia, cerca de Cadavedo (Valdés), dejó dos heridos, uno grave. Se trata de una mujer, L. S. M. de 20 años, que sufrió un traumatismo craneoencefálico y fractura abierta de húmero. El hombre, J. L. C. S. de 33 años, que viajaba con ella, es el segundo herido. Su pronóstico es leve.

El suceso se produjo sobre las tres de la tarde justo antes del túnel de Ribón. Por causas que se desconocen y se investigan, el turismo en el que viajaba la pareja herida colisionó con el coche que circulaba justo delante cuando ambos adelantaban por el carril izquierdo. Salió despedido e impactó contra la calzada.

El piloto del otro vehículo resulto ileso. El hombre, vecino de Luarca, conocía el trayecto, ya que trabaja en Soto de Luiña y lo realiza a diario. Como cada día laboral, Delfín Blanco se desplazaba a su casa tras concluir su jornada. "Nunca en 35 años tuve un accidente de tráfico", lamentó ayer en el lugar del siniestro, visiblemente emocionado por lo sucedido y muy pendiente de los heridos.

El varón que conducía el turismo que golpeó al segundo coche por detrás pudo salir por su propio pie y en el momento del siniestro indicó que "no recordaba qué había pasado", según los testigos. Los servicios sanitarios decidieron su traslado al hospital comarcal de Jarrio, en el municipio de Coaña.

La mujer que viajaba en el asiento del copiloto del turismo que perdió el control fue la peor parada. A causa de su delicado estado, se decidió la intervención del Grupo de Rescate de Bomberos del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) a bordo del helicóptero medicalizado. Ayer por la tarde no se temía por su vida.

La aeronave trasladó a la herida, con pronóstico grave, al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Tuvo que ser evacuada con collarín y una férula en el brazo herido. Los profesionales utilizaron además el colchón de vacío y la camilla para trasladar a la joven al helicóptero, que logró aterrizar cerca del siniestro, justo en la entrada al túnel de Ribón de la A-8 en dirección Galicia. Al lugar del suceso se trasladó un equipo de Bomberos de Asturias del parque de Luarca con un furgón multisocorro y un vehículo primera salida. También fue necesario el trabajo de dos ambulancias del SAMU, de la Guardia Civil y de la Policía Local de Cudillero.

El choque dejó retenciones kilométricas en un viernes víspera de la fiesta de la comunidad. La Guardia Civil se vio obligada a desviar el tráfico por la carretera secundaria (N-632) entre las localidades valdesana de Tablizo y Cadavedo.

Los coches que quedaron atrapados en el tramo de autovía comprendido entre Tablizo y el siniestro pudieron retomar su viaje sobre las cinco de la tarde, cuando se despejó la calzada. Los bomberos del parque de Luarca dieron por finalizada su intervención a las 17.24 horas. El grupo de rescate, lo hizo a las 17.09 horas.