Tres ladrones albaneses y rumanos acusados de asaltar un centenar de casas en Asturias aceptaron ayer cambiar parte del cumplimiento de su condena por la expulsión del país, según el acuerdo alcanzado por acusaciones y defensas. Dos de ellos fueron juzgados por videoconferencia con la cárcel de Madrid en la Sección Segunda de la Audiencia en un caso en el que también fue juzgada una española, condenada a un año, y otro albanés que aceptó cumplir cuatro años en España.

Los cinco formaban parte de una organización que obtuvo su mayor botín, más de 300.000 euros, en una casa de Grado. La Fiscalía les imputaba delitos de robo con fuerza, falsificación documental, lesiones y tenencia ilícita de armas, además de maltrato animal. La Fiscalía que pedía de 6 a 15 años, redujo sus peticiones al retirar la acusación por lesiones y maltrato animal. Un acusado, E. V., aceptó seis años, de los que cumplirá dos en España para luego ser expulsado.