Alfonso Fidel Portillo Martínez, de 60 años, falleció ayer en El Berrón tras golpearse la cara contra el suelo, al sufrir una caída o un desvanecimiento. Según apuntan testigos presenciales, el hombre se encontraba en las proximidades del polideportivo de la localidad, a las once y media de la mañana, paseando con su perro, cuando apareció tendido en el suelo junto a un charco de sangre. Al llegar la ambulancia y la médica de la zona, solo pudieron certificar su fallecimiento.
"Pasé con el coche y lo vi tirado. Me acerqué rápidamente. Junto a él había otra mujer que ya había llamado a la ambulancia. Tenía la cara ensangrentada, se había reventado la nariz contra la acera", apuntó uno de los testigos. Esta misma persona añadió: "Me agaché, le hablé y todavía respondía y respiraba pero con mucha dificultad".
A los pocos segundos, volvieron a tratar de comunicarse con él, "pero ya no respondió y no tenía pulso", relató el mismo testigo. El hombre acababa de fallecer sin que pudiesen auxiliarlo. El hombre vivía en una casa próxima a la zona y su mujer acudió al aviso de los que se congregaban en la zona.
Problemas de corazón
"Comentó que tenía problemas de corazón", señalan fuentes presenciales, lo que hace pensar que pudo sufrir un desvanecimiento. Al rato apareció la ambulancia y posteriormente una médica, que no pudieron hacer nada por salvar su vida. Lo aparatoso de este fallecimiento causó una gran impresión entre los vecinos de El Berrón, donde el hombre era muy conocido.
Los restos del fallecido, casado y padre de dos hijos, fueron conducidos al tanatorio de Laviana, donde quedó instalada la capilla ardiente. El cadáver será conducido a las dos y media de esta tarde al tanatorio La Florida de Sotrondio, en San Martín del Rey Aurelio, donde será incinerado.