El matrimonio Turpin, que mantuvo encerrados en condiciones inhumanas a doce de sus hijos durante toda su vida, se declaró culpable de secuestro y tortura en un Juzgado de Riverside, California. Louise Ann Turpin, de 50 años, y David Allen Turpin, de 57, que fueron detenidos en enero de 2018 en su casa, pasarán el resto de sus vidas en la cárcel.