Fátima Hacine-Bacha García, la madre de Santi, el menor de 17 años fallecido el domingo tras recibir una paliza propinada por varios jóvenes el viernes en San Sebastián, por no darles tabaco, lanzó un mensaje contra el "odio" y pidió que no se culpabilice a los inmigrantes. Cinco implicados son de origen extranjero: tres rumanos y dos magrebíes. Hacine-Bacha, hija de padre argelino y madre vasca, aseguró: "Santi es un chaval amoroso, muy social, le ha tocado esta parte y no queremos meternos ahí (en alusión a los mensajes de odio), no sirve. Estamos un poco en desacuerdo de que haya esta idea de odio, de culpabilizar a personas que igual no tienen tantos recursos como los que tenemos aquí". Ayer, el fiscal pidió cárcel para seis de los siete detenidos. El juez comunica hoy su decisión.