Una mujer británica de 41 años ha iniciado un proceso legal para lograr una indemnización de 10,4 millones de euros después de quedar tetrapléjica por un accidente en una piscina de olas de un hotel de Magaluf (Calvià). Un tribunal británico ha aceptado la tramitación de la demanda.

Los hechos se remontan al año 2017, según han informado varios medios británicos este domingo. Bonnie Lackey, originaria de la localidad de Crawley, se encontraba de vacaciones en un establecimiento turístico de Magaluf para celebrar la despedida de soltera de su prima.

Mientras estaba sentada en un flotador, la piscina de olas se activó y el movimiento que se generó hizo que volcase y se diese un golpe contra el suelo.

"Caí boca abajo en el agua. No podía comprender por qué mis brazos y mis piernas no estaban haciendo lo que yo quería que hicieran. Intenté levantar mi cabeza fuera del agua, pero tampoco pude. Aguanté la respiración y esperé desesperadamente que alguien viniese a por mí", explicó la mujer meses después del accidente.

Médula espinal afectada

Como consecuencia de esa caída, en que se rompió tres huesos del cuello y su médula espinal resultó seriamente dañada, esta madre de dos niños tuvo que regresar a Gran Bretaña en un avión-ambulancia. Quedó tetrapléjica y necesita cuidados especiales las 24 horas del día, que le han obligado a adaptar su casa gastándose casi 70.000 euros, según consta en la demanda.