Bimenes está conmocionado por la muerte de Manuel Vicente Nava, un hombre de 48 años con el que la desgracia se cebó en la madrugada del sábado al domingo. Nava falleció desnucado, después de caer a una zanja abierta detrás de su casa, en la localidad de Cuestespines.

El hombre volvía caminando de madrugada a su domicilio por la parte trasera. Según explican conocedores de la zona, allí hay un talud y unas escaleras, con las que podría haber tropezado, precipitándose de manera irremediable en la zanja.

La conmoción en el concejo tras el suceso es importante, nadie acaba de creerse la desgracia ocurrida. El fallecido tenía esposa y un hijo y todavía no había alcanzado el medio siglo de vida.

Su cadáver permanecerá hasta la tarde de hoy en el tanatorio de Nava, donde está instalada la capilla ardiente. Luego será trasladado a la iglesia parroquial San Emeterio de Bimenes, en Rozaes.

Allí se celebrará su funeral de cuerpo presente, a partir de las cinco de la tarde. Posteriormente, recibirá sepultura en el cementerio de la citada parroquia de San Emeterio. Su muerte ha supuesto una gran conmoción en el concejo, tanto por su edad como por las circunstancias inesperadas en las que se produjo.