Los residentes del número 62 de la calle La Cámara expresaron ayer su consternación por el crimen de la casa de citas de la séptima planta. No sabían precisar con exactitud el tiempo que lleva en funcionamiento este piso para la prostitución, pero sí "que hay quejas desde hace bastante". "Sabíamos que ese piso acabaría por darnos un susto. Entraba gente de todo tipo, algunos con malas pintas", señaló ayer uno de los vecinos consultados por este periódico.

Los vecinos de ese bloque eran muy conscientes de la existencia de un casa de citas, no como ocurría con el resto de residentes de los pisos de las inmediaciones. "Entra gente desconocida de forma permanente y a altas horas de la madrugada. No es plato de buen gusto para nadie", comentó otro de los vecinos dos horas después de que la funeraria trasladara el cadáver de la mujer transexual de 38 años al Instituto Anatómico Forense de Oviedo, para practicarle la autopsia durante la jornada de hoy. Otros vecinos simplemente se limitaron a decir: "Todos sabíamos lo que hay ahí y nadie estaba contento".

Mientras que la Policía Nacional investigaba y trataba de hallar pruebas en el interior de la vivienda, en el séptimo piso puerta izquierda, los vecinos curioseaban desde las ventanas de los bloques de enfrente y también a pie de calle. Los residentes se alarmaron al ver el gran despliegue policial en la zona, tanto de agentes de paisano como de coches de la Policía judicial.

La calle estaba enmudecida. Nadie sabía nada ni del agresor ni de la persona agredida y algunos ni siquiera sabían de la existencia de una casa de citas en el número 62 de la calle La Cámara. "Esta zona es muy tranquila, no damos crédito a que alguien sea capaz de matar a otra persona", señaló un hombre de unos setenta años y vecino del portal contiguo al del escenario del crimen nada más conocer la noticia.

Por la zona, situada a pocos metros del entronque con la calle Pruneda, llegó a haber personas que nada más enterarse de la brutal agresión a través de internet acudieron a la calle de La Cámara para curiosear.