El jurado popular que ha enjuiciado el homicidio de María del Carmen Martínez, la viuda del expresidente de Caja Mediterráneo (CAM) Vicente Sala, considera "no culpable" al único procesado y yerno de la fallecida, Miguel López, en un veredicto que se hizo público en la tarde de ayer, después de tres días de rocambolesca deliberación. El jurado había elaborado un primer veredicto que declaraba culpable al acusado, pero la magistrada, Francisca Bru, lo devolvió al considerar que las motivaciones eran demasiado vagas.

Poco antes de las cinco y media de la tarde, la portavoz de las seis mujeres y los tres hombres del jurado leyó el veredicto en la sala de vistas delante de López, tras casi dos días de deliberaciones secretas y en total incomunicación. Una discusión no exenta de polémica, ya que una mujer tuvo que ser sustituida al sufrir una crisis nerviosa, incapaz de soportar la presión. Seis de los miembros del jurado votaron no culpable. Los otros tres votaron por la culpabilidad. La sala estalló entonces en aplausos y gritos de alegría.

Tras escuchar el veredicto que le exonera de los cargos, Miguel López, yerno y único acusado del crimen, abandonó el Palacio de Justicia de Alicante con lágrimas en los ojos y muy emocionado, entre aplausos de sus amigos. López no pudo ocultar su emoción. Preguntado en varias ocasiones tras salir del Juzgado, contestó con un "nada", mientras caminaba llorando y abrazado por uno de sus mejores amigos, Ricardo.

Este sí se paró un minuto con los periodistas para afirmar que López ha sufrido una "presión enorme" por un proceso judicial de "excepcional" seguimiento mediático que ha provocado en el entorno una "situación muy complicada". Continuó indicando que "el tiempo robado no se puede recuperar". Pero añadió: "Los amigos estaremos ahí para ayudar a volver a la normalidad". Y agradeció la "ejemplar" labor del tribunal para explicar al jurado "cómo debían interpretar los hechos de un procedimiento tan complicado", donde las partes coincidieron en que no había pruebas directas, sino indiciarias. "Miguel no es capaz de hacer daño a una mosca", recalcó.

María del Carmen Martínez falleció poco antes de las 19 horas del 9 de diciembre de 2016 de dos disparos en la cabeza en el lavadero del concesionario de automóviles de Alicante de su propiedad y que regentaba su yerno, Miguel López. Durante el juicio, se puso de manifiesto el enfrentamiento entre la víctima y su primogénito, Vicente Sala, por un lado, y las tres hermanas de la fallecida y sus cónyuges, por otro.