La conductora que mató a Paula Fornés ha sido condenada a cuatro años y nueve meses de cárcel. El juez considera probado que la acusada Renata G., polaca de 48 años, circulaba en estado ebrio y mirando el teléfono móvil cuando atropelló con su vehículo a la adolescente de 15 años en la noche de Sant Joan de 2018 en sa Ràpita (Campos).

En el accidente resultó herida otra menor que iba con Fornés. Además, la mujer llevaba un carné de conducir de su país falsificado. El magistrado la declara autora de delitos contra la seguridad del tráfico, homicidio y lesiones imprudentes, falsedad documental y conducción sin carné. La condenada ha acudido este lunes a mediodía a los juzgados de Vía Alemania para conocer la sentencia.

El fallo rechaza los argumentos de la defensa de la acusada. El abogado pedía su absolución al entender que la prueba de alcoholemia practicada por la Policía Local de Campos, en la que la mujer cuadruplicó la tasa máxima permitida, debía ser anulada.

Según alegó el letrado, se vulneraron los derechos de la conductora al no facilitarle un intérprete de polaco tras su detención, pese a que lo pidió hasta tres veces. La defensa consideraba también que las pruebas sobre la falsedad del carné de conducir eran insuficientes. El magistrada rechaza también que Renata G. estuviera afectada cuando ocurrieron los hechos por un consumo "severo y crónico" de bebidas alcohólicas, como planteó en el juicio. Por contra, la absuelve del delito de conducción temeraria que le imputaba la acusación particular.

El juez impone también a la acusada la prohibición de conducir vehículos a motor durante seis años y le obliga a indemnizar a los padres y el hermano de Fornés con algo más de 173.000 euros. A la adolescente que resultó herida en el atropello tendrá que pagarle 916 euros.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 24 de junio de 2018, cuando Paula Fornés caminaba con unas amigas por un carril destinado a peatones y ciclistas en sa Ràpita. La condenada invadió esta zona y se llevó por delante a la menor, que falleció en el acto debido a las gravísimas lesiones sufridas. Tras el atropello, la conductora siguió circulando y se detuvo a unos 300 metros. Allí fue interceptada por unos testigos, que alertaron a las fuerzas de seguridad. La mujer fue arrestada y estuvo dos semanas en prisión preventiva.