Una casa a las afueras de Grado, en la carretera que va a Yernes y Tameza, entre El Rodaco y Llantrales, albergaba el que, según la Policía, es el primer laboratorio productor de resina de cannabis que se descubre en Asturias, con permiso de la planta para producir aceite de hachís que había establecido en la zona de Avilés un miembro del clan Jodorovich de Barcelona, asociado con un cónsul extranjero, y que fue desmantelada el pasado mes de septiembre, cuando aún no había comenzado a funcionar. En el caso de Llantrales, los agentes del grupo de Estupefacientes de la UDYCO de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Asturias se incautaron de un total de 1.300 plantas de marihuana y detuvieron, el lunes de esta semana, a los dos responsables del cultivo ilegal, que "no son del concejo", según indicaron algunos vecinos. En su laboratorio se elaboraba la resina de cannabis más potente. La titular del Juzgado número 1 de Grado mandó a ambos a prisión, investigados por un presunto delito contra la salud pública.

La casa donde se halló la marihuana está situada en un tramo boscoso, en una zona en la que pasa fácilmente desapercibida. Los dos encarcelados contaban con todos los materiales necesarios para una producción óptima, tales como extractores, ventiladores y lámparas, que eran accionados a través de la desviación del alumbrado público mediante un rudimentario cuadro eléctrico. Cultivaban hasta treinta variedades distintas de marihuana.

Según la Policía, en los últimos años se viene observando un notable incremento del consumo de sustancias derivadas de la marihuana, lo que ha provocado la proliferación de cultivos de grandes dimensiones ubicados en lugares discretos. Desde hace varios meses se vienen desarrollando gestiones para localizar este tipo de centros.

El inmueble encontrado en las afueras de Grado contaba con un laboratorio para la extracción, tratamiento y procesamiento de la resina de cannabis, una sustancia que una vez modificada alcanza unos grados de concentración de cannabinoides tales como el THC, CBD, CBN... muy superiores a los que se encuentran en la sustancia en su estado original, hecho que provoca que los efectos por lo tanto se potencien, alcanzando un alto precio de mercado. El laboratorio estaba diseñado para la producción de la resina conocida como BHO (Butane Hash Oil). Se trata de una extracción que se realiza utilizando gas butano y es de una gran potencia, según los conocedores de esta sustancia.

Este operativo llega pocos meses después de que se desmantelase en la zona de Avilés una planta que iba a transformar 400 kilos de cáñamo en 40 litros de aceite puro de cannabis en menos de doce horas. La planta, instalada en una nave industrial, estaba en pruebas y había costado la friolera de 300.000 euros. La operación, realizada por agentes de la Policía Nacional junto a los Mossos d'Esquadra, se saldó con cuatro detenidos.