Que Pedro Luis Nieva es una persona de una gran frialdad, lo muestran sus hechos, pero también las conversaciones que le grabaron. Una que mantuvo con la viuda de Ardines el 15 de octubre de 2018 es un buen ejemplo. Era la primera que hablaban desde el crimen, pese a ser muy cercanos. La esposa del edil le preguntó cómo había quedado el asunto de la conversación pícara entre Ardines y la mujer de Nieva, grabada por éste. Él le aseguró que habían quedado en reunirse "los cuatro" para hablar. Le escondió que unos días antes del crimen, había mantenido contacto con Ardines, después de que su mujer decidiese volver a Llanes. Un intercambio que no se ha conservado, al haber sido borrado por Ardines. El último mensaje fue un punto remitido por Nieva al edil que no fue recibido por éste, que ya le había bloqueado. Nieva le espetó a la viuda: "A ver si se aclara todo y lo podéis ir superando poco a poco". Y en otro momento, remató, en el colmo del cinismo: "Nadie tiene el derecho de quitarle la vida a nadie".
Ante su mujer, Nieva también disimuló lo suyo. "Si hubiera querido matar a Ardines, tenía dos escopetas y un rifle en casa", le dijo. "Yo no me alegro de la muerte de nadie, nadie merece morir, haya hecho lo que haya hecho. ¿Que a mí me ha jodido? Sí, pero morir, no merece morir", también le dijo. "Si yo mando a alguien a matarle, me voy de vacaciones a Madrid o Cádiz", añadió. Y para terminar de convencer a su mujer, acabó asegurando: "Si tan malo y tan agresivo soy, el mismo día que me enteré (de la infidelidad) podría haber cogido un arpón y matarle, no un año después".
