Los incendios forestales quemaron en Asturias entre los meses de enero y mayo 6.181 hectáreas, lo que supone una reducción del 56,3 por ciento respecto a las 14.132 que fueron arrasadas en el mismo periodo del año pasado, según la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales (Sadei). Este descenso se relaciona, sin duda, con el confinamiento.

El número de incendios forestales cayó a casi la mitad, de 1.232 a 682, lo que implica un descenso del 44,7 por ciento. Solo en mayo se registraron 82 incendios que afectaron a 320 hectáreas, frente a los 78 fuegos que quemaron 644 hectáreas en el mismo mes del año pasado. Durante el pasado año, Asturias registró 1.523 incendios forestales que afectaron a 14.470 hectáreas, el 9,68 por ciento arboladas, lo que supone multiplicar por siete la superficie arrasada en 2018.

Esa diferencia se explica por la oleada de fuegos que comenzó el 28 de febrero y que se prolongó hasta el 6 de marzo, periodo en el que se contabilizaron unos 380 focos que afectaron a 39 de los 78 concejos asturianos, con hasta 139 incendios simultáneos.