Dos hermanos de origen búlgaro, que eran menores en el momento de cometer los hechos, han sido condenados a sendas penas de un año de internamiento, uno en régimen cerrado y el otro en semiabierto, por torturar con unas alicates y un cinturón a un joven compatriota para robarle en su vivienda de Cheste. Los dos acusados de los delitos de robo con violencia en casa habitada en grado de tentativa -ya que finalmente no se llevaron botín alguno- y lesiones con instrumento peligroso reconocieron ayer en un juicio por conformidad los hechos, ocurridos el pasado mes de noviembre.

La víctima, que finalmente no tuvo que declarar en el juicio, relató en su día cómo sus agresores, a los que ya conocía y por ello les abrió la puerta, lo golpearon y torturaron con unos alicates, dejándolo inconsciente. Asimismo, lo reanimaron echándole cubos de agua para seguir golpeándolo para exigirle el pago de una deuda. Asimismo, dijo que uno de ellos lo grabó con su teléfono móvil, aunque este aspecto no ha quedado acreditado al no encontrar las imágenes ni el supuesto vídeo en el volcado de los teléfonos intervenidos por la Guardia Civil.

Inicialmente la Fiscalía de Menores solicitaba una pena de un año y medio de internamiento para cada uno, pero tras llegar a un acuerdo de conformidad, el Juzgado de Menores número uno de València dictó ayer sentencia in voce contra ambos por la que se les condena como autores de los delitos de robo con violencia en casa habitada en grado de tentativa y lesiones, ambos con uso de instrumento peligroso. Al mayor de los hermanos, que acaba de cumplir 18 años y cuenta con numerosos antecedentes, le impone un año de internamiento en régimen cerrado, de los cuales diez meses serán de internamiento efectivo y dos de libertad vigilada. Para el menor de ellos, de 16 años, el año de internamiento será en régimen semiabierto -ocho meses efectivos y cuatro de libertad vigilada-, según aclararon fuentes jurídicas.

Asimismo, el juez les impone a ambos la prohibición de aproximarse a menos de 200 metros de su víctima, su domicilio o su lugar de trabajo y de comunicarse con ella por cualquier medio durante un plazo de tres años. Así como el pago de 6.000 euros en concepto de responsabilidad civil.

Los hechos declarados ahora probados ocurrieron el pasado 16 de noviembre cuando sobre las 14.00 horas los dos hermanos, de 15 y 17 años en ese momento, acudieron al domicilio de su víctima, en una céntrica calle de Cheste, "con la intención de obtener un beneficio patrimonial ilícito. El agredido, también de nacionalidad búlgara, les abrió la puerta sin problemas, ya que los conocía. No obstante, una vez en el interior, "con la intención de que les dijera donde tenía el dinero y de menoscabar la integridad física ajena", le golpearon de forma reiterada en diversas partes del cuerpo, con puñetazos y patadas, así como con un cinturón y unos alicates, hasta llegar incluso a perder la conciencia parcialmente. Tras la paliza se marcharon sin dinero ni botín alguno.