Los bañistas y paseantes de la playa de Aguilar se llevaron ayer por la tarde un buen susto. Un coche sin conductor terminó empotrado en la terraza del arenal de Muros de Nalón. Al parecer, según los testigos, el coche estaba aparcado cerca del bar en una pendiente y su conductor pudo dejarlo sin freno de mano por lo que el vehículo cayó por la pendiente hasta detenerse en un pequeño muro que delimita la terraza. Gracias a esto no hirió a ninguna de las personas que estaban en la terraza.

El incidente causó un gran revuelo entre los bañistas y las personas que en esos momentos tomaban algo en la terraza del bar. A pesar de las espectaculares imágenes, no hubo que lamentar ningún daño personal.