Asturias perdió ayer su racha de buen tiempo, tras una primera semana de agosto predominantemente soleada y de altas temperaturas. Y lo hizo de forma abrupta. La tarde del domingo dejó una fuerte granizada en zonas del concejo de Somiedo, donde cayeron piedras de hielo del tamaño de un huevo. En diferentes puntos de la región pudieron sentirse, asimismo, tormentas acompañadas de precipitaciones.

En Somiedo, las bolas de hielo causaron gran expectación entre los numerosos turistas que estos días se encuentran en la zona, una de las preferidas por aquellos que buscan descubrir la naturaleza asturiana. Aunque también obligó a que quienes estaban a la intemperie buscasen refugio de forma urgente.

"Los niños se volvieron locos recogiendo el granizo. Eran bolas enormes, sobre todo al principio", relata una familia somedana, vecina de El Auteiro, en Valle de Lago. La granizada duró "unos quince o veinte minutos" y "había que cubrirse la cabeza porque hacía daño".

Los propios críos explicaban, aún impactados, lo que habían vivido. "Caían bolas de granizo supergrandes y las metimos todas en un cubo con una pala. Llenamos dos botes enteros con ellas y las metimos en el congelador. El prao debajo de la casa estaba completamente blanco", narraban los niños. A otros les pilló en el puerto de La Farrapona. "Sobre las seis empezó allí a lo loco y cuando pasamos por el puerto de Somiedo paramos a ver lo que había caído: abolló varios coches y rompió canalones de las casas... como un tornado", contaba otro testigo. Lo curioso es que Somiedo vivió una jornada calurosa, pues alcanzó una temperatura máxima de 29,8 grados, solo superada por los 30 grados de Ibias y los 30,4 de Aller.

Esa granizada, y las tormentas y precipitaciones en otras localidades asturianas, fueron la antesala de una semana que se prevé lluviosa en la región. Aunque en Asturias no habrá avisos por tormentas, como en otras comunidades, la previsión para hoy de la Agencia Estatal Meteorológica (Aemet) indica un claro predominio de cielos nubosos. Habrá "lluvias débiles y dispersas en el litoral occidental y zonas próximas del interior y algún chubasco disperso o tormenta aislada, que puede ir acompañada de granizo, por la tarde en la cordillera". Asimismo, las temperaturas máximas irán en descenso, quedándose en 26 grados en Gijón, 25 en Oviedo, Avilés y las Cuencas, y 27 en el Suroccidente. Y no se prevé, por ahora, que el sol se imponga en la semana que hoy empieza.