La oleada de robos en la zona oeste de Gijón prosigue. Ayer por la tarde, la dependienta de una panadería de la calle Brasil, en el barrio gijonés de La Calzada, frustró un atraco en el establecimiento en el que trabaja. El asaltante entró con la cara tapada y armado con un cuchillo, pidiéndole a la trabajadora que introdujera el dinero de la caja en una bolsa de plástico.

El suceso se produjo sobre las 16.30 horas de la tarde y se desarrolló con rapidez. El ladrón, de aspecto joven, entró al establecimiento reclamando el dinero de la recaudación. Cubría su rostro con un pañuelo y una capucha. En su mano, llevaba un cuchillo.

El delincuente posó una bolsa de plástico sobre el mostrador y exigió acceder a la parte de atrás del negocio, a lo que la trabajadora se negó. Ante la resistencia de la empleada, el caco decidió escapar a la carrera por el barrio de La Calzada.

La seguridad de la zona preocupa entre los comerciantes, que hace semanas iniciaron una campaña reclamando más seguridad. El Ayuntamiento de Gijón reforzó la seguridad en el barrio aumentando la presencia de patrullas de la Policía Local, a finales de julio.