La Fiscalía provincial de Valencia ve indicios de “varios delitos contra la integridad moral” en el trato a personas internas en la residencia DomusVi de Llíria y ha decidido remitir al juzgado de Llíria que corresponda por turno para que investigue los hechos, según acaban de confirmar fuentes de la Fiscalía Provincial de Valencia.

“Existen indicios de que el trato dispensado a los residentes por la directora de de la residencia, en su posición de garante y por los encargados del cuidado, vigilancia y atención de los mismos socavó gravemente su dignidad e integridad moral, hecho que todavía se hizo más patente y lacerante en el caso de los residentes que eran más vulnerables por su avanzada edad, por sus graves enfermedades psíquicas y físicas y, en suma, por su alto grado de dependencia al ser quienes requerían de la máxima protección”, señala el fiscal responsable de las diligencias de investigación penal abiertas tras conocerse las imágenes de algunos residentes grabadas por una empleada de la limpieza.

El estremecedor relato que hace el fiscal de las imágenes aportadas por la trabajadora refleja las malas condiciones en las que se encontraban algunos residentes. “En las imágenes se puede ver a tres residentes de avanzada edad comiendo solas en sus sillas de ruedas, haciéndolo con muchísima dificultad al no contar con ayuda de terceras personas, no obstante su reducida movilidad y autonomía personal; a una residente que está sentada, inmovilizada en un sillón con cinturón de sujeción y semidesnuda, llevando sólo el pañal; a un residente, quien, al intentar levantarse del sillón, se cae, se golpea la cabeza contra el suelo; quedando boca abajo, sin moverse y, sin recibir ayuda; a un varón que está tumbado en una cama sin sábanas y con lesiones en las piernas; a un residente que tiene lesiones en un brazo y que está sentado en un sillón con cinturón de sujeción; a varios residentes con heridas en la cara y en los brazos, así como a otras personas que están inmovilizadas en sus sillas mediante cinturones de sujeción”.

Por estos hechos, la Fiscalía y la Guardia Civil de Llíria tomaron declaración a la trabajadora que grabó las imágenes, que aportó tras su comparecencia “un dispositivo USB con 5 archivos de tipo imagen y 11 de tipo video que se corresponden con las imágenes difundidas”. La trabajadora realizó labores de limpieza en la residencia desde el 19 de abril de 2020 hasta el 19 de agosto de 2020 y que grabó los vídeos y fotografió a algunos usuarios de la residencia “debido al estado de abandono en el que se encontraban”.

A raíz de las imágenes difundidas, un total de trece familiares presentaron denuncias ante la Guardia Civil, que también tomó declaración a otros dos trabajadores de DomusVi Llíria. En el estado también se incorpora los cuatro expedientes administrativos de la Conselleria de Igualdad por las inspecciones realizadas a la residencia en los años 2015, 2016, 2019 y 2020.