Un piloto malagueño de 26 años falleció y su acompañante alemán de 25 resultó con lesiones graves en ambas piernas tras estrellarse ayer una avioneta en el aeródromo Leoni Benabú del El Trapiche, en el municipio malagueño de Vélez-Málaga. Tras despegar, el piloto llamó a la torre de control para avisar de que se encontraba mareado, y la avioneta, a una altura de unos 500 o 600 metros, comenzó a caer haciendo espirales. El aparato se estrelló, a una velocidad relativamente baja, en la zona de los hangares, según indicaron miembros del Real Aeroclub de Málaga, que utiliza como base el citado aeródromo.
El sistema Emergencias 112 Andalucía recibió el primero de los avisos alertando del accidente de avioneta a las doce y veinte del mediodía. Hasta el lugar de los hechos se desplazaron efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga, así como agentes de la Guardia Civil, que se han hecho cargo de la investigación, y los servicios sanitarios, para atender a los accidentados.
El diputado de Emergencias, Manuel Marmolejo, informó de que cuatro efectivos del parque de bomberos veleño se encargaron de las tareas de rescate de las víctimas. El piloto malagueño falleció en el acto. Su acompañante alemán -que no sabía pilotar la avioneta- fue trasladado al hospital comarcal de Vélez-Málaga.
Nada más despegar, el joven llamó a la torre de control. Sus frases eran inconexas y no se le entendía del todo, pero parecía dar a entender que no se encontraba bien. Se trataba de un piloto con experiencia, por lo que se descarta el error técnico. Por otro lado, parece poco probable el fallo mecánico, aunque ese extremo lo corroborará la investigación en curso. Cuatro personas han fallecido en el mismo aeródromo desde 2013.
