La Guardia Civil de Oviedo, en el marco de la “operación Fasgueo”, ha desarticulado una organización criminal dedicada a robos con fuerza en las minas de Cerredo, en Degaña. Se ha detenido e investigado a 38 personas a las que se les imputan delitos de robo con fuerza, falsedad documental, receptación y pertenencia a grupo criminal. El material robado ha sido valorado en dos millones.

A finales de agosto, la Guardia Civil de Pravia identificó a los ocupantes de una furgoneta que había sufrido un accidente y a los ocupantes de dos vehículos que la acompañaban. Intervinieron material eléctrico de alta tensión: cables, pletinas de cobre y condensadores. La Policía Judicial de Pravia dejó el material en un almacén municipal de Salas. Al día siguiente, se personó un representante de la Mina Cerredo para denunciar el robo de material, que se correspondía al incautado, por 180.000 euros.

A mediados de septiembre, una llamada advirtió a la Guardia Civil de que, a las dos de la madrugada, en la mina de Cerredo, había varias furgonetas y mucha gente. Tres patrullas interceptaron nueve vehículos. Tres estaban cargados con 300, 600, y 800 kilos de cable de cobre. Fueron identificadas 21 personas de varios puntos de Asturias. Sobre uno de los identificados pesaba una orden de detención dictada por un Juzgado de Gijón.

La organización contaba con más de treinta vehículos. Entre ellos se contaba una furgoneta, cuyas placas de matrícula estaban falsificadas y correspondían a un vehículo de Toledo. Los agentes de Pravia lograron localizar uno de los vehículos en Avilés. Se detuvo al conductor, tras comprobar que habría sido sustraída en Móstoles (Madrid). En noviembre y diciembre, la Guardia Civil localizó a todos los implicados en estos robos. Pasaron a disposición del Juzgado de Cangas del Narcea.