Un acusado de estafar a varias empresas reconoció ayer los hechos que le atribuía la Fiscalía y, tras haber abonado la totalidad de la responsabilidad civil, aceptó una condena de un año, nueve meses y un día de prisión por un delito continuado de estafa, con la atenuante de reparación del daño. La vista oral estaba señalada en la sección segunda de la Audiencia, aunque el reconocimiento de los hechos evitó su desarrollo.

El acusado, en distintas ocasiones a lo largo de 2013, adquirió a cuatro empresas de Cerdeño (Oviedo) y Pontevedra bienes o productos por importe de 140.000 euros con el propósito preconcebido de no abonarles su importe, obteniendo así un beneficio económico ilícito a costa de las mismas. Para ello, creó varias sociedades, a cuyo frente colocó como socio y administrador a un testaferro que solo figuraba como aparente responsable de las sociedades, siendo él, en realidad, quien las controlaba y gestionaba. Aceptó además el pago de una multa de 810 euros.