El juez ha mandado al 'Rey del Simpa' a la cárcel de Zuera durante los próximos 15 días. Antonio Miguel Grimal Marco, conocido en la capital aragonesa por comer en bares y restaurantes y después no pagar (se trata de un delito leve, pero esta tipificado como una estafa en el Código Penal), fue detenido el lunes por la noche por enésima vez tras protagonizar un nuevo 'simpa' y pasó la tarde del martes a disposición judicial, concretamente ante el Juzgado de Instrucción 11, quien decretó su ingreso en prisión.

Más allá de todas las ocasiones en las que ha sido denunciado por comer y cenar de gorra en innumerables establecimientos de Zaragoza meses atrás, solo desde el 20 de julio la mecánica de los acontecimientos con el 'Rey del Simpa' de protagonista ha sido calcada día tras día. Se podría resumir así: come sin pagar, es detenido y llevado al calabozo, pasa a disposición judicial, queda en libertad por orden del juez e inmediatamente entra de nuevo en un bar y vuelve a consumir sin pagar. Es detenido y de nuevo empieza el ciclo. Así, jornada tras jornada desde el día 20.

La novedad ahora es que tras ser detenido el lunes y pasar a disposición judicial el martes, el juez lo ha mandado a Zuera 15 días al parecer ejecutando una sentencia que ya pesaba sobre él. Las pequeñas estafas de Grimal Marco tienen como castigo multas económicas. Como está declarado insolvente, los jueces conmutan las cuantías no pagadas por días de cárcel.

La última detención

Fue el pasado fin de semana entre comida y detención a la que este pícaro del siglo XXI tiene a la Policía Nacional Local acostumbrados el último suceso en el que Grimal estuvo implicado. Antes de bajar la temperatura corporal en las aguas de la plaza del Pilar con un chapuzón en la fuente de la Hispanidad en plena ola de calor, el hombre había salido del juzgado tras ser puesto en libertad. Después, tras secarse, acudió al restaurante Gastrobar 93, en la calle León Felipe, donde pidió un agua de litro y medio, un plato de Yakimeshi y otro de ternera con salsa de ostra. Cuando fue a pedir más platos un cliente le reconoció, avisó al bar y al no querer pagar por lo que había ingerido fue detenido.

Así puso fin a una semana en la que no pago ni un taxi y mucho menos un factura de de más de 91 euros en un restaurante japonés de la céntrica plaza de Los Sitios de Zaragoza. Allí se puso, tal y como dirían los taurinos, de tabaco y oro antes de ingresar en los calabozos de la Jefatura Superior de Policía de Aragón donde siempre cena y desayuna. Y así suma y sigue.

En total, el 'Rey del simpa' suma ya más de 60 detenciones por las que ha sido multado en varias ocasiones. Ahora deberá ir a la cárcel durante 15 días.