El juzgado de Instrucción número 1 de Alcoy ha decretado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, de la mujer de 42 años que presuntamente mató a su madre a primera hora de este martes en el domicilio de esta ciudad en el que ambas convivían. Así lo han indicado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), después de que la acusada haya prestado declaración ante el titular del citado juzgado, que ha asumido el caso al encontrarse en funciones de guardia.

La mujer, según han añadido las mismas fuentes, queda ahora como investigada en una causa por un posible delito de homicidio o asesinato, abierta por este mismo juzgado. La presunta parricida ha sido puesta a disposición judicial este jueves, tras permanecer dos días en los calabozos de la Comisaría de la Policía Nacional en Alcoy. En este tiempo se le ha realizado un examen psiquiátrico para determinar su estado de salud mental. Como ya se ha venido publicando estos días, la acusada padece al parecer alguna patología de este tipo, por lo que cabía la posibilidad de que el juez dictara su ingreso en un centro psiquiátrico y no en prisión.

La salida de la acusada de la Comisaría de Alcoy ha tenido lugar en torno a las 11.30 horas de este jueves, lo que de forma implícita señala que la declaración ante el juez no se ha prolongado durante mucho tiempo. La mujer había sido detenida la misma mañana del martes, poco después de conocerse el presunto parricidio, toda vez que ella misma fue quien manifestó a la Policía que había matado a su madre. La fallecida presentaba varias puñaladas y un cinturón alrededor del cuello, con el que presuntamente había sido estrangulada.

Los hechos se produjeron en torno a las 7.00 horas del martes en una vivienda del número 39 de la Alameda Camilo Sesto de Alcoy, una zona muy céntrica y de un cierto nivel económico, y en la que además hay cada día bastante actividad desde primera hora de la mañana al haber en el entorno numerosos comercios, establecimientos hosteleros, oficinas y centros sanitarios y administrativos. No obstante, por la hora en que ocurrió todo, ningún vecino ni transeúnte escuchó nada.

El suceso ha causado una importante conmoción en Alcoy, una ciudad en la que afortunadamente los hechos de este calibre son muy esporádicos. Los vecinos de la zona, como publicó Información, diario perteneciente al grupo Prensa Ibérica al igual que este medio, no salían de su asombro aún al día siguiente de lo ocurrido. Todos coincidían señalar a la fallecida, de 65 años y con otros tres hijos, como "una buena persona", al tiempo que apuntaban que el comportamiento de la hija era mucho más esquivo, pero que de ninguna forma se habrían esperado que pudiera ocurrir algo así. La arrestada tenía su propio domicilio, al parecer en la misma zona de Alcoy, pero pasaba en ocasiones temporadas con su madre.