Sanidad

Muere tras confundir un derrame cerebral con una otitis

Tras realizarle un TAC craneal, se determinó que la joven padecía una "trombosis de senos venosos", y fue trasladada a la UCI con otitis externa y trombosis cerebral en el hemisferio derecho

Muere tras confundir un derrame cerebral con una otitis.

Muere tras confundir un derrame cerebral con una otitis.

C. A. C.

La muerte de una joven de 18 años en Cádiz ha generado una gran controversia y ha abierto un debate sobre la calidad de la atención médica en España. Según informa el diario 'La Voz del Sur', la chica acudió al centro de salud La Longuera en Chiclana en septiembre de 2022, quejándose de vértigo, pérdida de conocimiento y otalgia derecha. Tras ser trasladada al Hospital Clínico de Puerto Real, los médicos le diagnosticaron una otitis y le dieron el alta. Sin embargo, poco después falleció por un derrame cerebral, y su familia denunció al Servicio de Salud Andaluz.

La denuncia se centra en la mala actuación médica y la falta de pruebas diagnósticas adecuadas. Según el abogado de la familia, "sólo había que hacer una prueba y el aparato estaba disponible, pero por una serie de despropósitos y de mala actuación médica, en este caso omisiva, pues ha perdido su vida". Tras realizarle un TAC craneal, se determinó que la joven padecía una "trombosis de senos venosos", y fue trasladada a la UCI con otitis externa y trombosis cerebral en el hemisferio derecho. Sin embargo, ya era demasiado tarde y la joven falleció después de someterse a una operación urgente en el Hospital Puerta del Mar.

El caso ha generado una gran polémica y ha puesto de relieve la necesidad de una mejor atención médica y una mayor responsabilidad por parte de los profesionales de la salud. En este sentido, se han destacado varias deficiencias en la atención médica en España, como la falta de pruebas diagnósticas adecuadas, la falta de recursos y la falta de seguimiento de los pacientes.

Las denuncias por mala praxis médica son cada vez más comunes en España, y en muchos casos son el resultado de una falta de formación y de recursos por parte de los profesionales de la salud. En este sentido, es necesario que se tomen medidas para garantizar una atención médica de calidad y una mayor responsabilidad por parte de los médicos y del sistema de salud en su conjunto.

En resumen, la muerte de esta joven de 18 años es un triste recordatorio de la importancia de una atención médica de calidad y de la necesidad de que los profesionales de la salud sean responsables y estén debidamente formados y equipados. Esperamos que se tomen medidas para garantizar que casos como este no vuelvan a ocurrir en el futuro.