La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Menos números, más certezas

El preacuerdo alcanzado por Unidas Podemos y el PSOE para la formación de un Gobierno en España

El preacuerdo de Gobierno entre Unidas Podemos y el PSOE llegó el pasado 12 de noviembre de forma tan inesperada como deseada para una buena parte del país. El compromiso, la premura y la seguridad de Pablo Iglesias y Pedro Sánchez en cuanto a los términos del preacuerdo apuntaron un hecho histórico: el primer Gobierno de Coalición en la historia de nuestro país. La noticia sirvió para acallar en parte el ruido generado por el ascenso de la extrema derecha y ofreció un balón de oxígeno para una mayoría de la ciudadanía que deseaba acuerdos y estabilidad.

A la espera de los detalles que falta concretar, el contenido del acuerdo ofrece garantías para impulsar un Gobierno progresista y de cambio que desarrolle políticas clave que desde Unidas Podemos hemos venido defendiendo para la protección de los derechos sociales y la mejora de la calidad de vida de la mayoría social. Dignificar los salarios y las pensiones, impulsar un nuevo orden laboral que defienda los derechos de la gente trabajadora, avanzar en la lucha feminista y por las libertades sexuales, crear nuevos derechos civiles o impulsar una transición ecológica justa, son algunas de las razones por las que este preacuerdo de Gobierno tiene que consolidarse.

Las dificultades son evidentes en un contexto de numerosos ataques por parte de las derechas (que, por otro lado, no tienen proyecto alternativo) y por los inestables equilibrios parlamentarios. Sin embargo, ante la pregunta de si este acuerdo llega más débil que antes del 10N por la inferioridad numérica, cabe responder que es un acuerdo que llega con muchas más certezas. Hoy nadie puede poner en duda que nuestro país necesita compromisos y estabilidad.

Compromisos por el progreso, por el cambio, por ampliar derechos y libertades y no por recortarlas. Compromisos porque el poder político deje de estar al servicio de los grandes poderes económicos y se ponga al servicio de la gente común y corriente de nuestro país. Es por eso que la participación de las militantes y simpatizantes en consultas de estos días son esenciales para reforzar el acuerdo, pero para conquistar derechos desde las instituciones va a ser especialmente importante el apoyo y la movilización en la calle por parte de esa gente común. Para resistir los ataques, para avanzar, para que nadie dude de cuáles son los intereses prioritarios de nuestro país: los intereses de los y las de abajo.

Compartir el artículo

stats