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Vita brevis

Pues no resucitamos

Suecia, Corea o Vietnam no han cerrado industrias o negocios, mientras aquí seguimos en arresto

En el domingo de Resurrección existía antiguamente una antiquísima costumbre, que hace algún tiempo que ha desaparecido totalmente. Consistía en que las gentes en ese día se saludaban diciendo: "¡Resurrexit!", que quiere decir "¡Resucitó!". El saludado correspondía diciendo: "¡Vere resurrexit!", que traducido de los latines significa "¡Verdaderamente resucitó!". Es que antes del Concilio Vaticano II todas las oraciones y sus derivados se decían en latines, que tan acostumbrado estaba el personal a ello que se cuenta una anécdota de unas beatas que estaban rezando el rosario recién comenzó a hacerse en castellano y una de ellas, al oír "ruega por nosotros", miró a la otra con extrañeza y ésta le aclaró: "Sí, mujer, significa ora pro nobis".

El caso es que esta tradición de saludarse de ese modo en el domingo de Resurrección es una costumbre que sobrevivió mucho más tiempo en los países orientales en los que son mayoritarias las iglesias ortodoxas, de tal manera que en muchos de ellos aún mantienen ese uso, aunque no en latín, sino en griego, en ruso o en la lengua litúrgica que utilicen.

Lo que sí se mantiene en casi todas partes es celebrar ese domingo con un buen yantar y con suculentos postres tradicionales y exclusivos para la ocasión, como es la mona de Pascua o, aquí en nuestra villa, el exquisito bollo mantecado escarchado. Es en casi todas partes una gran fiesta de primavera, que es la resurrección de la naturaleza.

Había muchas personas ilusionadas con que en este domingo íbamos todos a resucitar, pudiendo salir ya de nuestros sepulcros hogareños. Se cumplía justamente el sábado el fin de la prórroga del Estado de Alarma y la cuarentena impuesta por el Gobierno y avalada por un Congreso de los Diputados disminuido de miembros y de "miembras".

Pero, "Fabio, las esperanzas cortesanas / prisiones son do el ambicioso muere / y donde al más activo nacen canas", como bien dice la "Epístola moral a Fabio", de Andrés Fernández de Andrada. No hubo ocasión. El doctor Sánchez, don Pedro, estaba muy orgulloso de que España fuera el país con medidas más restrictivas contra el bicho chino y decidió prorrogar otra vez el encierro de toda la población, de tal manera que ha convertido el territorio nacional en el mayor campo de concentración de la historia. Otra quincena de arresto y amenaza con otra más.

En el Código Penal anterior las penas tenían nombre propio según su duración. Así existía la pena de arresto menor, que era de un día a un mes, y el arresto mayor, que era de un mes y un día a seis meses.

A las gentes ágrafas en leyes eso de "y un día" les sonaba misterioso y algunos decían que ese día no se sabía cuándo iba a ser. Así temían que era una especie de prórroga inconcreta del arresto. Pues se ve que ahora estamos en eso mismo, que hasta ahora estábamos condenados a arresto menor y hemos pasado a arresto mayor sin que veamos vislumbrar el final del cumplimiento de la condena.

Permítanme darles mi opinión de modesto abogado sobre esta detención colectiva. Yo creo que, en primer lugar, es ilegal, porque con la declaración del Estado de Alarma no se puede confinar a toda la población, pues suspende de forma general los derechos fundamentales a la libertad personal y a la libre circulación de las personas, que consagran los artículos 17 y 19 de la Constitución Española, que sólo podrían suspenderse si se declarara el Estado de Excepción.

En segundo lugar , y aunque no soy médico ni Dios que lo vea, me parece que con otras medidas podría haberse hecho frente a la epidemia con más eficacia. Esto lo digo simplemente por comparar lo que han hecho en otros lugares, en los que no han recluido obligatoriamente a todo bicho viviente. Les pongo los casos conocidos de Suecia y, sobremanera, de Corea y Vietnam. En estos países han recomendado, pero no obligado, mantenerse en casa en la medida de lo posible, pero no han cerrado ninguna industria o negocio. Sí han tomado la temperatura a multitudes, han hecho miles de pruebas y han desinfecto todo lo que existe y más. Se ve que eso es más efectivo porque en Vietnam, que linda con China, no ha habido ni un solo muerto.

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