La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Un campeón prematuro

El mierense Kike Gutiérrez, a sus 16 años, viene de lograr con el Llaneza los títulos regionales en las distancias de 1.500, 800 y 400 metros libres en categoría absoluta

Kike Gutiérrez, en un entrenamiento. SILVEIRA

Apenas 16 años le contemplan, pero el desparpajo que muestra fuera de la piscina es equiparable a la calidad que posee dentro del agua. El mierense Enrique Gutiérrez, o Kike, como prefieren que lo llamen, es ya una realidad de la natación asturiana. En el último Campeonato de Asturias en piscina cubierta, este joven nadador logró las victorias en categoría junior y absoluta en las pruebas de 1.500, 800 y 400 metros libres con su club, el Manuel Llaneza.

Y es que se puede decir que Kike ha pasado toda la vida en la piscina. "Comencé a practicar este deporte con apenas dos años, mis padres me apuntaron a clases para que aprendiera a nadar y poder tener cierta autonomía cuando fuera a la playa", comenta. Lo que empezó como un hobby, pronto se tornó en competición. Sus primeras carreras se remontan a hace ocho años. "Por entonces, estaba allí por hacer algo, no empecé a tomarme en serio la competición hasta hace tres o cuatro temporadas", destaca. Pese a todo, Kike apenas recuerda su primer triunfo en una prueba. "Hace ya mucho", bromea.

Sus tres oros en el último Campeonato de Asturias vienen a reafirmar el buen trabajo hecho durante las últimas campañas. "Me toca esforzarme para lograr los éxitos, lograr tres medallas de oro es muy difícil, hay muchas horas de trabajo detrás", destaca. En la pasada temporada, Kike Gutiérrez se hizo con el título en la prueba absoluta de 800 metros. Este año ha triplicado la apuesta.

Ahora se centra en preparar el Campeonato de España que tendrá lugar en Mataró a finales del mes de febrero. "Estar con los mejores de España es una gran experiencia, la natación te regala momentos bonitos como este, poder salir de casa, vivir cosas nuevas", admite.

No será la primera vez que Kike Gutiérrez participe en una prueba de ámbito nacional. Y es que hace dos temporadas, el mierense del Manuel Llaneza ya logró una medalla en el Campeonato de España de aguas abiertas disputado en la localidad gerundense de Banyoles. "Sonó la flauta", bromea. Lo cierto es que era la segunda vez en la que Kike Gutiérrez se enfrentaba a una prueba de estas características. "No tenía mucha idea de lo que eran las aguas abiertas, llegué allí con los mejores del país, pero tenía claro que iba a salir con el cuchillo entre los dientes y salió todo bien", admite. Muchos más triunfos han llegado en esta modalidad, como el de la Travesía de Navidad de Gijón.

El mierense prefiere desenvolverse en las pruebas de larga distancia. "Es muy diferente afrontar un 1.500 a un 50, en las pruebas largas tienes que encontrar un buen ritmo, que te permita llegar bien al final", asegura. Para estos resultados es necesario mucho entrenamiento. Actualmente se encuentra en el Centro de Tecnificación de Oviedo. "Durante dos días me levanto a las 5 y 20 para hacer dobles sesiones, de lunes a viernes nado de 15:30 a 19, pero es algo que merece la pena", comenta. Sus dos entrenadores, Vitos en Mieres y Jero en Oviedo, "son dos grandes técnicos, muy distintos, pero les debo mucho a ambos", apunta.

Este fin de semana, Kike ha participado en una de las pruebas más especiales, el Trofeo Vitos Natal, organizado por su club, el Manuel Llaneza. "Nadar en casa siempre es bonito", admite. Un nadador que, con su gran esfuerzo, seguirá dando alegrías a los mierenses.

Compartir el artículo

stats