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El cogollu

Un ñeñu de La Villa

Un paseo por la plaza de San Francisco en un día con pasado y futuro

Pasear por la plaza de San Francisco de Villaviciosa depara la sorpresa de encontrarse con jóvenes de otros tiempos de compromiso parroquial, hoy respetados padres y madres de familia: Ángel Valle y María Luisa Vallines, Nuria Miravalles y José Antonio Alonso, y Vicente Rodríguez y la gijonesa Eli Fernández, y permite brindar por otro medio siglo de vida y amistad. El reencuentro lleva a levantar la copa, alguna con sidra, cómo no, en el domingo de inauguración del Museo de la Semana Santa. Una jornada para la historia de La Villa con asistencia del arzobispo Jesús Sanz, el párroco y vicario Jorge Cabal y el alcalde Alejandro Vega, en la señalada celebración del 350º aniversario de la Cofradía Jesús Nazareno que preside Nicolás Rodríguez.

Ilusión, entusiasmo y fe lo hicieron posible. Y se palpan. Pasado, presente y futuro se funden en un "ñeñu guapu" que "paez que tuvo toa la vida ahí" en el jardín de la plaza y es la obra "Creciendo" del artista José Antonio Pérez. Pasado, presente y futuro se exponen en el convento de San Juan de Capistrano, donde se enaltece la Semana Santa, "tan de Villaviciosa como la sidra, la danza de la Virgen del Portal o los monumentos del románico", en precisa definición de Nicolás Rodríguez. Resulta conmovedor contemplar en el claustro, entre tanto arte, vida e historia, en este tiempo de imagen y vídeos compartidos, la película de 1926, de José Alonso Bedriñana, con Julio Peinado de operador, una memorable cinta de la religiosidad popular en Villaviciosa. El museo bien merece la visita. Conforta en cuerpo y alma ir a La Villa. Más, si cabe, si las voces de la Coral Capilla de la Torre entonan "Bendita la Reina de nuestra montaña".

El gaitero José Ángel Hevia, al otro lado del Atlántico, a orillas del Caribe, sostiene que Asturias no es un lugar geográfico sino un estado mental. Lo avala su pariente Laura Hevia, que acoge con gratuita hospitalidad a quien visita el Museo.

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