El drama de María la de Magdala, o La Magdalena, ocurrió porque por aquellos tiempos se vivía también la tragedia de la Guerra Civil. Es decir, la mayor desgracia que le puede ocurrir a un pueblo donde las familias se mezclan y los vecinos se conocen todos.

En Teverga, la contienda fratricida concluyó con la toma del Frente de Ventana por la Bandera falangista legionaria de Lugo y la Batería de artilleros del Ferrol. A modo de pinza, unos por el sur y los otros por el norte, no permitieron la evasión de ningún vecino ni de las persona que había pertenecido al bando perdedor.

Se dice que los bercianos, incorporados a las milicias teverganas, con algunos vecinos locales, fueron los verdaderos culpables de la quema de imágenes en varias iglesias del concejo: Prado, Santianes, Taja, Páramo, Villanueva? Y se comenta que la imagen de La Magdalena fue arrojada al río, de suerte que quedó enredada entre las raíces de un aliso. Desmanes y luto por todas partes, porque también la historia recoge las ejecuciones del pozo Táranu, de otros lugares luctuosos y las condenas injustas a muerte que salieron del palacio de Agüera.

Y como estamos de fiestas hablemos de alegría y dejemos el dolor y el luto a un lado sin olvidarlos, para que no vuelva a repetirse la Historia. El primer domingo de agosto se celebraba en Entrago la fiesta de La Milagrosa, pero aquel año, una vez recuperada la imagen del río y ante el drama que había pasado durante todo aquel tiempo, se decidió cambiar la fiesta de la Milagrosa por de La Magdalena, que es la que en estos días se festeja, cumpliendo en esta edición ochenta años. Los más viejos del lugar comentan que, por aquel entonces y durante muchos años, siempre llovía para la fiesta. Se decía que era una represalia de la santa por el tiempo que había permanecido en el agua.

Las fiestas de La Magdalena fueron, durante muchos años, las más importantes de todo el concejo y de Los Valles del Trubia. Tenían lugar en el campo de fútbol de la Pumariega. Allí daban comienzo el sábado con una gran verbena amenizada por las grandes orquestas de la época: "La Negresco", "La Nepal", "La Marimbas Punto Azul", "La Luna de Mieres", "La Jarly", "Gran Capitol", "La Jaz-Melodía", "La Siboney"? bajo un alegre paraguas de bombillas de colores. El domingo todo comenzaba con los alegres sones del puntero y del roncón de la mano de Adolfo Fuxó con Pepín el de Mariquina o Julio Luspicianu, que recorrían el pueblo de un lado para otro y por la noche, después de la romería venía una grandiosa verbena con la iluminación repleta de bombillas de colores. Y el lunes era el día más entrañable con la "Fiesta del socio", con manteles extendidos por todo el campo.

Entrago de Teverga es el primer pueblo del concejo que se encuentra en la carretera Trubia-Puerto Ventana, y siendo pórtico o entrada a Teverga, han acertado con el topónimo a la hora de su bautismo. Encrucijada entre las depresiones de Valdesampedro y Valdesantibáñez, confluyen los dos ríos que riegan ambos valles con praderías y bosques a lo largo de todo el recorrido.

Un año más vuelven para regocijo del pueblo y de los valles del concejo. Pilar Tuñón al frente de todo, se va a encargar de que los festejos salga bien con romerías, actos religiosos, pruebas infantiles y deportivas, homenajes, almuerzo en comunidad y las dos grandes verbenas amenizadas por prestigiosos grupos musicales. ¡Felices fiestas a todos!