Raro verano. D. Juan Carlos que sale de malas formas al tiempo que el Presidente del Gobierno descansa en uno de los regalos que al Emérito le habían hecho. Raro porque alguien sigue temiendo a los asturianos. Los lenenses, sólo con la palabra "Rata" hacen que alguien ponga pies en polvorosa y hasta tal vez que corte la coleta y se pase al moño. Fue tan raro que los lugares habituales de solaz, Islas, Levante, Sur... fueron permutados por el norte y las zonas rurales, que tuvieron un verano como no conocían. Y yo decidí utilizar mi creatividad para crear un deporte de riesgo, el "velutining". Con una raqueta de diseño propio, parecida a las de ping-pong, un poco mayor y con el mango más largo, vestido con atuendo de apicultor, me coloco delante de las cajas del colmenar. Cuando una "asiática" revolotea esperando atrapar una abeja, la golpeo y una vez en el suelo la remato. Aunque no dispongo de marcadores, supero los veinte puntos a la hora. Pienso que nunca llegará a haber una federación, pero observo que las avispas me temen casi tanto como si fuese lenense. Cada vez veo menas por aquí. Con el traje de apicultor y la raqueta seguro no amedrentaría a vicepresidentes, aunque las bichas esas se lo están pensando. Mis próximos me preguntan si chiflé. Les digo que ahora todo es raro y yo no voy a serlo menos.
