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Los transportes en el alto Aller

Los diferentes vehículos utilizados para trasladar viajeros en la zona

Con la inauguración el 21 de octubre de 1929 de la carretera de San Isidro a la vecina provincia de León se abre una nueva vía de comunicación. En setiembre del citado año, de manera oficiosa ya había surcado las rampas del puerto una furgoneta de Zapico, aunque otras fuentes apuntan al coche del sifonero de Cabañaquinta Luis Díaz, un Citroën 2 Cv O-2.110, reconvertido más tarde en vehículo de reparto de bebidas. Al iniciarse la década de los 30 del pasado siglo se implanta un servicio de viajeros entre Felechosa y Santullano (Mieres) con una furgoneta propiedad de José Arias "El Rápido" conocido hostelero en Felechosa. Poco tiempo después Luis Megido sustituye al "Rápido" con un autocar que cubre el trayecto entre Moreda y Felechosa. En 1933 "Autos Zapico" tenía el servicio de viajeros entre Felechosa y Oviedo. Finalmente se hace cargo de la línea la empresa "Autos Aller" cuyo autobús era conocido popularmente como la "exclusiva" con dos servicios diarios entre Cabañaquinta y Felechosa y un trayecto diario entre Cabañaquinta y Puebla de Lillo (León) desde el 22 de julio de 1934.

Con la llegada del ferrocarril "Vasco Asturiano" a Collanzo en 1935 desaparecen las líneas alternativas de viajeros a la parte alta del municipio. Coincidente con aquel tiempo "El Rápido" adquiría la leche en el puerto para venderla después en la zona baja del concejo y en ocasiones hasta trasladaba algún vecino cobrando una perrona el viaje o en especie por un cuarto de litro de leche?

En aquellos años los hermanos Megido -Luis y Manuel- de El Pino disponían de autobuses para excursiones a Covadonga y a los mercados, ferias y fiestas patronales de distintas localidades asturianas o santuarios de las regiones limítrofes de León, Cantabria o Galicia. Con el estallido de la guerra civil los autocares de los hermanos Megido son confiscados.

Ya en los años 50 Manuel Megido hermano de Luis, asumiría la línea de viajeros de Collanzo-Felechosa, dando continuidad a la misma Pepe Zapico y posteriormente la sociedad mixta de Francisco Suárez y Francisco Tejón. Desde 1967 la empresa Alsa se hace cargo del trayecto Oviedo-Felechosa.

En el capítulo del servicio de viajeros es inevitable recordar el taxi de Castelo con base en Collanzo, trasladando a los vecinos de los valles de Felechosa y Casomera que llegaban a Collanzo en el ferrocarril del Vasco, en el denominado "tren de la noche" y que al no cubrir ese horario la línea de viajeros obligaba a tomar el taxi o subir caminando. Buena parte del servicio de taxi de Castelo era para trasladar al médico cuando se le requería por alguna urgencia. A Castelo le sustituiría en la plaza de taxista el citado anteriormente Manuel Megido. En el valle de Casomera recuerdo las furgonetas o autobuses de viajeros entre Casomera y Collanzo, de Leo, Velasco y Basilio.

Otro tipo de servicio de transporte a finales de los 50 era el dedicado a bajar a los mineros a los centros mineros de la Carinsa, Industrial Asturiana y Hullera Española. Ramón y Luis Megido -hijos de Luis- lo hacían en el valle de Felechosa y Leo en el de Casomera.

Sin duda alguna la dinastía de los Megido -Luis y Manuel- y posteriormente sus hijos Ramón, Luis o Joserín, y los hijos de éste, han monopolizado el transporte en el Alto Aller, tanto de mercancías como de viajeros, con las excepciones ya citadas, en un tiempo en que los vehículos de transporte eran muy escasos.

El camión de Luis Megido destacó por aquel entonces por su versatilidad. Recién terminada la guerra civil, Luis Megido adquiría un camión modelo Dodge Brother, matrícula O.8.719. Dicho camión fue una institución durante décadas en el Alto Aller con una versatilidad sorprendente, servía para el transporte tradicional de mercancías como madera, piedras de afilar, ganado, materiales de construcción, carbón, hierba, mudanzas, etc. Ante la falta de otros vehículos motorizados cumplía funciones hasta de ambulancia. En cierta ocasión, relata su hijo Luis, el camión trasladó a una embarazada de la Pola del Pino hasta un sanatorio de Oviedo colocando un colchón con su somier en la caja del camión. Otras veces bajaba a Collanzo a por el médico. Sirvió igualmente, en una ocasión, requerido por la autoridad militar de la época como transporte de guardias civiles cuando el atraco del maquis en Felechosa en 1945 en Casa el Rápido. Finalmente el camión de Luis se recuerda con nostalgia por su servicio a la fiesta de la Virgen de Braña y otro tipo de excursiones festivas, mercados y ferias.

El camión de Luis fue por tanto santo y seña del transporte en el Alto Aller durante muchos años y su fisonomía permanece inalterable para muchos de sus vecinos veteranos.

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