El sur de Asturias se iguala al Sur de España. Pero no para bien. Mieres tiene al 38% de la población en riesgo de pobreza y exclusión. Una tasa similar a la de Andalucía y la más alta del Principado, aunque el resto de la región no es territorio de bonanza, precisamente. Así es la cruda realidad, por encima de macroeconomías y brotes verdes de papel. Los pequeños comerciantes piden que los sueldos, en general, suban para que la gente pueda comprar. "Es el mercado, amiguitos", que diría Rato para justificar el latrocinio de Bankia. Pero en una economía de mercado el círculo del empleo, la producción y las ventas se cierra sobre sí mismo con el capital como rodamiento. Hoy, en la era de la globalización, los capitales fluyen libremente, sin normas ni cortapisas, porque el mercado ya no interesa. Y por debajo de esta nueva regla sólo queda sobrevivir, en el sur de Asturias y en el resto de puntos cardinales.
