La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Mario Antuña

Siete leguas

Mario Antuña

Plagas

Cada vez somos menos, según el recuento anual del padrón. Y encima nos llegan las plagas. Que si la avispa asiática, que si la oruga, que si especies de plantas invasoras, que si las truchas que repueblan los ríos alleranos se las comen los cormoranes con cuchillo, tenedor e impunidad (estas son otras plagas)... No estaría de más alguna plaga positiva, de la que no haya motivos para quejarnos. Por ejemplo, una de buenos inversores con proyectos solventes y puestos de trabajo dignos. Soñar es gratuito y mitiga el sufrimiento, aunque pueda generar falsos espejismos y la pérdida del contacto con la realidad, si es que esta existe filosóficamente. Sí son reales los problemas de aparcamiento en las principales ciudades de las Cuencas y, miren por dónde, como una buena plaga, están apareciendo aparcamientos. Como esas obras de fin de mandado que ponen el mantel a las mesas de elecciones. Siempre vuelven con las urnas.

Compartir el artículo

stats