Podría pensarse que por recurrente sería una noticia decaída de interés. Creo que no. Que más de medio millón de escolares hayan recibido la formación del programa de emprendedores de Valnalón, y que el plan continúe su expansión por España y aumente su alcance, sigue teniendo una importante trascendencia. Hay quien piensa, empujado por las terribles consecuencias de la crisis, el elevado paro juvenil, la precariedad y temporalidad del empleo y el escaso futuro en nuestro horizonte, que eso de emprender es un engañabobos, un entretenimiento sin salida. Quien así lo crea se equivoca. El cambio de mentalidad de nuestros escolares para afrontar un mundo cada vez más abierto y digitalizado es una de las herramientas claves para encarar el porvenir. Aquí o donde sea. Seguir mirándose el ombligo de un mundo cerrado que ya no volverá es la llave del fracaso. Y Valnalón propone el éxito futuro.
