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La Liga de los detalles

El buen momento del Oviedo y los puntos fuertes del equipo de Anquela, incómodo para cualquier rival

"Vaya ricos que saben estos tres puntos", comentaba un aficionado del Real Oviedo mientras subía a uno de los autobuses de la línea azul aparcado junto a las pistas de tenis en la calle Antón. La satisfacción expresada de esa forma tan espontánea y directa acaso fuese porque hasta el más animoso de los aficionados contaba con un empate a cero cuando el partido enfilaba al cuarto de hora final, cuando todo puede pasar pero el margen de rectificación vuela mas veloz que el crono del árbitro de turno. Pero en esto llegó Bolaño o Christian, a gusto del lector, y con un par de asistencias tan venenosas para el rival como sorprendentes para la grada azul rompió un partido de esos que se deciden por detalles. En la Segunda División casi todos, porque aquí sobrado no va ninguno; fíjense en la UD Las Palmas que en los primeros partidos de Rubén Castro ya se veían de vuelta en Primera antes de tiempo o en el Málaga, que parecía el heredero de aquel Levante de Muñiz que dominó de principio a fin. Dice el sector más crítico de la afición que los de Anquela no van sobrados de ideas pero qué equipo juega bien hoy, si hasta el Barcelona va líder a trancas y barrancas en cuanto a juego se refiere, y el Madrid también depende en demasía de los detalles de un chaval de 18 años o de que Benzema esté más o menos inspirado.

El Real Oviedo estuvo espeso, sin ideas durante gran parte del encuentro ante el Alcorcón, un equipo que no pasa precisamente por su mejor racha. Pero si una virtud tiene el equipo de Anquela es su incomodidad para el equipo rival, el sábado los de Cristóbal Parralo apenas inquietaron la meta de Champagne. Esa capacidad para minimizar al contrario será muy necesaria en la próxima jornada ante un Albacete que jugó un gran partido en La Romareda, donde demostró por qué está tan arriba: Zozulia es un incordio permanente, Bela ya dio algún disgusto a la afición ovetense la temporada pasada y de la calidad de Susaeta también saben un rato los del Tartiere. Independientemente de lo que pase en tierras manchegas, los azules se han ganado el respeto que merecen los equipos que trabajan y lo dan todo del minuto 1 al 90, algo imprescindible en esta categoría. Da la impresión de que el Real Oviedo tiene amplio margen de mejora cuando Saúl Berjón recupere su nivel y Omar Ramos pueda empezar a ofrecer la calidad que se le intuye para acompañar a un Tejera que crece conforme avanza la temporada. Con todo y con ello, siempre serán imprescindibles detalles como el de Bolaño del pasado sábado o los que suele aportar Diegui Johannesson para competir en una liga tan igualada y tan, tan larga como la 1,2,3. Que veamos muchos más.

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