De nuevo la canción de moda: la Champions te da sorpresas y La Liga, 1,2,3 ¡Mambo! también aporta las suyas. Una semana más la liga doméstica de moda es la Segunda con vistas a Primera. En la azotea de la clasificación hay vértigo, mareos y más de uno se viene abajo. El Depor ya agotó el comodín del cambio de entrenador. De momento sin resultado. Difícil superar en el Sadar al líder con un tal Rubén García, antes domiciliado en El Molinón, ahora reinando en Pamplona, usando la directa que les lleva a Primera por la puerta principal, sin ascensor con paradas. ¿Tiene suerte Osasuna? La que se trabaja, más un par de momentos afortunados por partido. Como todos lo que están en racha. Por ejemplo, el Sporting de José Alberto López y demás cuadro técnico. No es el ovetense, con domicilio laboral en Mareo, amante de ponerse medallas antes de tiempo. Él prefiere las condecoraciones colectivas y a final de temporada. Mientras sigue disimulando, con ese toque a lo Mendilibar, con funda, mono de trabajo, para dejar claro que el hábito hace al monje. No va de entrenador de alta escuela y baja cama -como cantaba Cecilia- al señorío. JAL es entrenador de base, de principios, sin trampa ni cartón.
En el Nou Estadi le espera Enrique Martín, técnico del sector "veteranos unidos", con el colmillo así de retorcido y el pelo así de revuelto: con pinta de músico contemporáneo de Rosendo o Fortu/Obús. El navarro es una joya para los medios audiovisuales: siempre da juego en la banda. En las declaraciones también deja sus perlas, envenenadas algunas. El discurso que salvó al Albacete el pasado año, en Tarragona no arraiga. Está ante las ocho últimas jornadas con pocas opciones, milagrosas, de salvación. Nastic y Córdoba necesitan en esta Semana Santa un Lázaro que levante su pesada losa en la clasificación. O a Sandoval que también se presta para situaciones desesperadas.
Hablando de necesidad, el Sporting necesita algo más en el centro del campo. Si Carmona aún no está listo para el esfuerzo y aquel Sousa de Alcorcón -¡ya llovió!- está desaparecido en combate, habrá que probar si son compatibles, a domicilio, el trío Nacho, Cristian y Cofie. Pensar que el Nastic espera entregado sería un error. Todavía hay retos personales en la plantilla tarraconense. Un tal Luis Suárez aspira a logros superiores si su equipo sigue hacia abajo. El delantero colombiano tiene buenas hechuras y puede hace sufrir a la defensa del Sporting en alguno de sus despistes habituales. Esas pérdidas de concentración que el joven míster sportinguista sufre en sus carnes y le causa alopecia. Menos mal que en el último sábado de la Semana Santa se programan las historias de romanos y la Biblia tiene guion de sobra para todas las situaciones. En el Nou Estadi de Tarraco, en el Anfiteatro del fútbol, puede dominar Uros "Gladiator" Djurdjevic. El serbio de mirada desafiante en el área. Ni fieras o espadas, ni silbatos o tarjetas, pueden con el gladiador del Arena Stadium. Ridley Scott ya tiene un doble para sustituir a Russell Crowe para las escenas de acción en futuras secuelas.
