Sexta jornada. La temporada todavía no ha dejado ver lo suficiente como para establecer un patrón con el que hacer cábalas de cara a lo que podrá aspirar este Sporting y cuáles serán sus rivales a batir dependiendo de la meta que se busque. No hace falta repetir lo extraña que está siendo y va a ser esta temporada. Sin público en la gradas parece incluso otro fútbol donde da la sensación de que los jugadores de sangre caliente atemperan su carácter y los tribuneros dejan sus actuaciones para las ruedas de prensa. Lo que sigue inalterable es la calificación de los entrenadores como profesión de riesgo: un par de ellos ya han pasado por la trituradora, y alguno más está al caer. Es extraña hasta la clasificación, donde hay cuatro equipos a los que le faltan partidos por jugar. De todas formas, si se aplicara lo que en su momento hacían entrenadores como Ciriaco para comprobar la tendencia de sus equipos, la del Sporting de Gallego sería de récord. El entrenador de la última UEFA y de la salvación en la temporada de la concursal hacía paquetes de cinco partidos, de quince puntos. Con esa unidad de medida los rojiblancos estarían camino de pulverizar todos los registros y superar los 92 puntos. No parece probable por muchas cuestiones, algunas propias y otras ajenas. Aunque hay que esperar para comprobar cómo es la tendencia en este inicio del nuevo paquete de cinco que se estrena hoy ante el Tenerife y repasar la alineación para ver si hay castigos por lo de hace una semana.
