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El salario mínimo de Rajoy

Las críticas de la oposición a una iniciativa razonable

Mariano Rajoy, tan criticado por la derecha (Aznar- Rivera) y por toda la izquierda (Sánchez- Iglesias), está tomando decisiones políticas y económicas que tienden a superar la difícil situación que se vive en España, minada por el independentismo nacionalista y por los efectos de la crisis económica, que a pesar de los evidentes signos recuperación son millones los españoles que se las ven muy negras para no caer en el umbral de la pobreza por los bajos salarios. Una medida es el anuncio de la subida de Salario Mínimo Interprofesional, que llegará hasta 850 euros en 2020, siempre y cuando los empresarios y trabajadores firmen la paz social y se comprometan a que las empresas sean más eficaces y aumente el número de trabajadores fijos y con salarios dignos.

Rajoy reconoce que el SMI actual debe ser mejorado y para eso ha propuesto a los sindicatos y patronal que el salario mínimo, que es de 707,6 euros, comience a incrementarse a partir de 2018 un 4%, llegando a los 735,9 en 14 pagas; en el resto de los ejercicios será incrementado hasta 850 en el 2020. Esta subida afectará en 2018 a 530.000 trabajadores. Rajoy ha afirmado que el esfuerzo ha merecido la pena, pero desea que estas subidas lleguen hasta las últimas personas que lo necesiten. Algo por otra parte obvio porque todo político que se precie debe tener entre sus objetivos el bien común por encima de los intereses individualistas y partidistas.

Ante esta medida los partidos de la oposición como Ciudadanos, que se presenta como el recambio del PP por su clamoroso triunfo en Cataluña , ven en este subida del SMI una buena medida, pero ineficaz, porque no es la solución a la precariedad. Según Rivera,hoy otros mecanismos que son muchos más eficaces que la subido salarial, pero no aporta ninguno.

Los portavoces de Podemos, acostumbrados al populismo y a dar soluciones fáciles a problemas difíciles (demagogia), han acusado al Gobierno de electoralista. Rajoy obra con sensatez porque lo que propone es la necesidad de más empresas y más trabajadores cotizando para mejor la situación de todos. Lo que no se puede hacer es hundir la economía, provocar la fuga de empresas y gastar millones en experimentos independentistas rupturistas a costa de la enseñanza, la salud y los servicios sociales.

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