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Pulpo como animal de compañía

El entusiasmo de los de las banderas al viento por la "actuación" de Aznar en el Congreso de los Diputados

El hecho de que la mayor parte de su declaración se base en la mentira y la negación de hechos evidentes es lo de menos, si aceptamos pulpo como animal de compañía bien podemos aceptar las falsedades del último de los protagonistas, negativos, pero protagonistas, de la reunión de Las Azores, en reconocer que en Irak no había armas de destrucción masiva. Tardó cuatro años en hacerlo, lo hizo con la boca pequeña y no se disculpó por el error cometido como hicieron sus cómplices. En realidad, no fue un error, fue una coartada para justificar la invasión de un país cuyo petróleo querían quedarse.

Aznar negó, por supuesto, la existencia de una caja B en el Partido Popular alegando que no había ninguna prueba. Como en la Guerra del Golfo es el único que mantiene una afirmación que no se sostiene, hay al menos pruebas suficientes para que en el juicio de la Gürtel se considerase probada la existencia de esa caja B y el Partido Popular fuese condenado por financiación ilegal. Hay testimonios de empresarios que reconocieron haber efectuado pagos en negro, de militantes del Partido Popular que reconocieron no sólo que la caja B existía, si no que habían recibido pagos opacos de ella, hay papeles cuya autoría ya nadie niega. La sentencia considera probado que fueron fondos de la caja B los que sirvieron para comprar acciones en una ampliación de capital de Libertad Digital a través de personas interpuestas. Pero es igual, para Aznar todo eso no vale, su palabra es ley. Como en 2.003, cuando afirmó como única prueba de las armas de Irak "Puede estar usted seguro y todas las personas que nos ven. Estoy diciendo la verdad". Díjolo Blas, punto redondo.

Se declaró "orgulloso de su primer gobierno". Cada uno puede enorgullecerse de lo que quiera, pero hacerlo de un gobierno, del cual sólo hay dos ministros que no han tenido problemas con la justicia deja bastante claro quien es este personaje.

Mintió sobre Zaplana, sobre Correa a quien dijo no conocer, resolviendo la pregunta sobre el dinero que había aportado a través de la Gürtel para la financiación de la boda de su hija con un escueto "Yo no me casé", mintió cuando dijo que el PSOE había sido condenado por financiación ilegal, cuando acusó a Pablo Iglesias de haber recibido millones de Venezuela e Irán, cuando dijo que España no había participado en la guerra de Irak, mintió y mintió, una y otra vez, pero es igual, está tan crecido que, como dije antes, considera que su palabra es ley y lo malo es que hay muchos ciudadanos que se lo creen, y aprovechan su declaración para sacar pecho multiplicando hasta el infinito, a través de las redes sociales sus mentiras.

El artículo 502 del Código Penal castiga con "prisión de seis meses a un año o multa de seis a doce meses" a quien "convocado ante una Comisión parlamentaria de investigación faltare a la verdad en su testimonio" pero es igual, Aznar tiene bula y más ahora que ha impuesto como presidente a uno de sus afines, al que puede manejar desde la sombra.

Al final, el problema, una vez mas, está en los ciudadanos que no quieren analizar el lodazal en que estamos inmersos, los que se dicen apolíticos, los que dicen no ser de derechas ni de izquierdas y rematan la frase con un "pero ?", los que se mueven por filias o fobias y sólo leen la prensa que les interesa, que es aquella que les facilite argumentos para defender sus posiciones y atacar a sus enemigos sin que la veracidad o falsedad de esos argumentos les importe un comino.

Y hasta aquí hemos llegado, cuesta abajo y pedaleando, sin darnos cuenta de que el barro nos salpica a todos y o lo remediamos o acabará por enterrarnos.

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