Los conciertos vuelven al Museo Casa Natal Jovellanos, y lo hacen con un ciclo consolidado en la programación musical de la ciudad que cada dos años rinde homenaje a la figura de Ígor Medio, uno de los músicos que más ha contribuido a dinamizar la escena folk asturiana. Fue Leticia González (Baselgas) la encargada de poner voz a un repertorio copado por piezas para el baile, acompañada por Elías García al bouzuoki y Rubén Bada al violín y al bouzuoki. Una cita que llenó el patio del museo y que fue el pistoletazo de salida para una serie de conciertos centrados en la tradición musical asturiana.
Fue un concierto a pelo, sin amplificación, cumpliendo escrupulosamente el apelativo "de cámara" que denomina a un ciclo bienal que sirve para constatar el buen momento de la música folk en la región. El pasado viernes eran tres pesos pesados los que unieron sus fuerzas para dar vida a un repertorio de distintas latitudes del Principado y con diferentes ritmos de baile: jotas, agarraos, saltón, xiringüelos, muñeira? un amplio abanico de estilos con piezas vocales e instrumentales.
La primera jota de la jornada sirvió para templar ánimos, entrar en faena y comenzar a disfrutar de la voz de Leticia, que cuenta con un timbre limpio y claro perfecto para la ligereza de los fraseos y para lucir adornos. Leticia tiene una subida fácil y una coloratura agradable que se impone por colocación y proyección más que por esfuerzos de fuelle, y cantando a capella no hay trampa ni cartón. Lució fuerza y temple sosteniendo el agudo en un son d'arriba de Cangas de Narcea, y calidez y efectivo manejo del fraseo en la tonada "Donde yo me pueda ir", que desató una cerrada ovación. También dejó patente su buen manejo de pandero y pandereta con la que acompañó varias piezas.
Rubén Bada también se arrancó a cantar en varias piezas, pero su fuerte está en la parte instrumental. Este multinstrumentista protagonizó las melodías tanto en los diálogos con la voz como en los temas instrumentales, dando el aire adecuado a cada tema y en perfecta compenetración con los ritmos y armonías que construía Elías García a base de arpegios y rasgueos. El concierto avanzaba con un programa variado: una añada de Gozón, una jota de Tresmonte, otra no muy alejada, de Vidal? y, para acabar, una muñeira D'Astierna. Aún quedaban los bises, que se cerraron como se cierran las romerías, con la "Danza la xarra", en la que Leticia Baselgas volvió a lucirse. Buen comienzo para un ciclo de conciertos que continúa el próximo viernes con Gonzalo Llao, Pedro Sanjurjo y Miguel Villar, y que finaliza el viernes 30 con "Ún de Grao".
