Todos los ojos del Ayuntamiento están puestos ya en la doble negociación para las ordenanzas fiscales y los presupuestos más importantes en muchos años por la hecatombe económica y social en ciernes, que va a dejar cifras demoledoras, algunas nunca vistas. Y la gran duda es en qué cesta va a poner sus huevos el gobierno local. Dentro del PSOE hay quien aboga por reeditar el acuerdo con Podemos de hace un año para sacar adelante unas cuentas volcadas a la izquierda, lo que favorecería la consolidación de un frente de centroderecha llamado a endurecer su oposición en este difícil otoño. Pero también hay una corriente que vería con buenos ojos llegar a una entente con Ciudadanos, al estilo de la que tantea Pedro Sánchez a nivel nacional. Una jugada que pondría patas arriba el tablero municipal hasta ahora conocido. Salir de dudas no llevará mucho tiempo.
