Dos décadas, casi nada. Veinte años han transcurrido desde que fuese inaugurado el Parador de Turismo "Monasterio de San Pedro de Villanueva", a la vera del Sella, en término municipal de Cangas de Onís. Un proyecto que tuvo muchos frentes abiertos en aquellos finales de los 90 del siglo pasado, pues algunos lo veían como un establecimiento de total y absoluta competencia, el cual llegaría a cerrar numerosos negocios hosteleros en la vieja capital del Reino de Asturias y alrededores. Hoy en día, me congratulo del largo y difícil camino recorrido hasta consolidarse como uno de los mejores de la red estatal de Paradores de Turismo de España.

En estos momentos de celebración de efemérides, además de coincidir con el 80.º aniversario de la puesta en marcha del primer parador en este país, el abulense de la Sierra de Gredos, inaugurado en aquel entonces por el rey Alfonso XIII, reconozco la gran labor despachada en sus inicios por la persona que más apostó por ese maravilloso "buque-insignia" de la hotelería en el área de influencia de los majestuosos Picos de Europa: César Álvarez Montoto, un cangués de Zardón, que defendió a capa y espada ese ambicioso proyecto, siendo el primer director del mismo.

Mucho ha llovido desde la colocación de las primeras piedras, pero creo, en mi opinión, que el turismo comarcal puede sentirse agraciado de contar con un complejo de esas características en esta zona y con la consiguiente creación de empleo -eso sí, todo es mejorable-. Atrás queda el impulso que dio en aquellos momentos el que fuera Secretario de Estado de Turismo, el asturiano José Manuel Fernández Norniella, para que estuviese construido -la inversión supuso más de 1.300 millones de las antiguas pesetas- con quince meses de adelanto sobre el plazo de ejecución previsto.

Cuatro lustros se cumplen y por ello vuelvo a insistir en algo que sería el culpen de ese ambicioso proyecto bendecido en el acto de inauguración por el párroco de Villanueva José Castaño Posada -recientemente fallecido- como Parador de Turismo "Monasterio de San Pedro de Villanueva", haciendo el número 86 de la red estatal. Y es que, como ya apunté por el verano de 1998, la comarca oriental asturiana dispone de un establecimiento a la altura de poder acoger reuniones de los jurados de los Premios, ahora "Princesa de Asturias". Sería el no va más para el sector turístico del Oriente y sobremanera para este, digamos, Parador Real. ¿Alguien no ha pensado en ello? Pues, ahí queda reflejada la sugerencia por si algún día se acaba haciendo realidad. Andando con infinidad de conmemoraciones y cantidad de eventos programados por los Centenarios cúlmen es una pena que nadie -ojalá me equivoque- haya pensado en acercar a Villanueva a alguno de los jurados que deliberan y otorgan esos prestigiosos premios. Y el Parador de Turismo de Cangas de Onís está más que suficiente preparado para ello, incluso para recibir a los mismísimos reyes de España, don Felipe VI y doña Letizia, si es que, finalmente, asisten a los fastos del primer centenario de la coronación canónica de la Santina, en Covadonga, a principios del mes de septiembre, en compañía de las Infantas.