En relación con la noticia publicada en este periódico con el titular "La mujer que denuncia acoso de la Policía admite dar pienso a jabalíes en defensa" quiero aclarar:

No es la primera vez que los jabalíes aparecen cuando estamos alimentando a la colonia formada por cinco gatos que vive asentada en esta finca, no nos queda más remedio que acceder a la misma para alimentarlos porque viven dentro y no salen fuera, simplemente accedemos al principio de la entrada, les alimentamos y salimos. En alguna ocasión los jabalíes han aparecido de imprevisto sin darnos tiempo a salir y no queda más remedio que actuar de la mejor manera que crees conveniente en ese momento, y es darles algo de pienso que llevamos para alimentar a los gatos. En el vídeo que se publica se ve un gato pasando por detrás de la barandilla, segundos antes de que aparecieran los jabalíes los estábamos alimentando a ellos, es algo que no se ve en el vídeo, con lo que se ofrece una información totalmente sesgada de la realidad y que es muy importante aclarar ya que cambia la situación totalmente. Nosotras no alimentamos jabalíes como otras personas que van en su busca con alimento preparado para ello. A nosotras nos sorprenden en una tarea permitida y adecuada a la Ordenanza Municipal de Convivencia Ciudadana y reaccionamos como creemos que es más adecuado para nuestra seguridad, y es proporcionar algo de pienso en ese momento sin movimientos bruscos ni salir corriendo y cuando se ponen a comer salir del lugar. No los alimentamos, es una distracción, utilizamos lo que tenemos a mano que es el pienso para alimentar a la colonia de gatos, no tenemos una pistola para disparar dos tiros al aire y ahuyentarlos.

¿O es que en presencia de jabalíes a los policías les está permitido sacar la pistola para ahuyentar o defenderse y no pasa nada y a nosotras echar un puñado de pienso inicia un procedimiento sancionador?

Si creyera que estamos haciendo algo ilegal, no hubiera confirmado que somos nosotras a la periodista, no tenía ninguna obligación.

El acercamiento de estos animales al entorno urbano dificulta nuestro trabajo, en alguna ocasión no hemos podido acceder a la colonia porque los vemos venir y tenemos que volver en otro momento. No es algo que ocurra sólo aquí y se quiera achacar a que se alimenta a una colonia y por eso aparecen, ya que sólo vienen en momentos puntuales, sino que esto sucede en diferentes puntos de la ciudad haya o no colonias de gatos. Hace 10 años que trabajamos con colonias en esta zona y esto viene sucediendo de hace un tiempo. No siempre fue así, es un factor más que se suma a la lista de despropósitos que esta tarea lleva implícita. Desde las ventanas de este edificio nos graban, nos apuntan con punteros láser a la cara y nos deslumbran, nos insultan y desde el piso primero que hace esquina nos han llegado a lanzar botellas de vidrio y no denunciamos, que es lo que deberíamos de hacer. Pero el problema es que en el 90% de los casos tenemos la experiencia de que la respuesta por parte de la Policía Local es ponerse de parte del que se queja y repetir de manera sistemática que alimentar está prohibido, cansadas de repetir siempre la misma cantinela de que pertenecemos a una Asociación Protectora que tiene firmado un convenio con el Ayuntamiento, en este caso con la gestión del albergue municipal, para controlar y gestionar colonias registradas y que alimentamos de acuerdo a la ordenanza etc. etc. Todo para que su contestación vuelva a ser que está prohibido sin atender a ningun tipo de argumento o explicación. Para esto preferimos aguantar lo que nos echen.

En todas las zonas de Oviedo donde se alimentan colonias pasa lo mismo, siempre hay algún vecino que no tolera la existencia de animales en su entorno y que llama para quejarse de continuo. Afortunadamente son los menos, pero llegan a ser muy molestos e insistentes y en este caso han aprovechado el tema de la persecución a los personas que alimentan jabalíes para acusar falsamente ya que la única verdad es que alimentamos gatos, que la noche del lunes mi madre venía de alimentar a los gatos, no a los jabalíes, que en eso no mentía y por eso no la pueden sancionar. Más bien a quienes deberían de imponer una sanción es a la patrulla de la policía por la actuación de esa noche. No se puede andar a tiros en plena ciudad ni utilizar la pistola tan alegremente, ni perseguir como a una delincuente hasta su domicilio sin causa justa. Desde que salió la noticia no hacemos más que recibir el apoyo y la comprensión tanto de Asociaciones como de gente que ni conocíamos que al leer la noticia nos reconocen en ella y ven perfectamente la realidad de la situación y lo incongruente de la versión dada por la policía local.

En las imágenes queda evidenciado que es pienso de gato lo que utilizamos, el que llevamos para alimentar a las colonias, no vamos con "potas grandes" llenas de comida para jabalíes como denunciaba un vecino esa noche del lunes a la policía local y así lo relataba la misma policía a otro diario, sino que llevamos nada más que pienso, el único que utilizamos para alimentar a las colonias y el que puntualmente y de manera obligada tenemos que utilizar para salvar la situación.

Qué triste que siempre tenga que ser el más justo quien deba justificarse y que las acciones que en realidad deben ser castigadas queden como siempre en agua de borrajas. Porque en este caso, la justicia, ni la hay, ni la habrá y desde luego, para nosotras, ni se la espera.