Los artículos de consumo vinculados a películas, series de animación o personajes fantásticos -productos licenciados- generan unos ingresos descomunales. Ése fue un filón que ya atisbó George Lucas cuando negoció con la Twenty Century Fox en la primera película de "Star Wars": renunciaba a su salario como director a cambio del 40% de las ganancias de taquilla y de todos los derechos del merchandising. Se hizo multimillonario vendiendo muñequitos. Hoy en día, la compañía mundial líder a la hora de rentabilizar este sector es Disney, que en 2014 ingresó 42.500 millones de dólares por los productos vendidos bajo licencia de esta multinacional, donde además de los personajes tradicionales de la compañía ahora también están integrados todos los de la saga estelar de Lucas y todos los del universo Marvel.
En el ranking que anualmente hace la revista "Global License" -la publicación de referencia- de las 150 compañías que más facturan en este sector, la mayoría entre las diez primeras tienen que ver de alguna manera con la fantasía. Por ejemplo, la multinacional Iconix Brand Group, que gestiona el mundo de Strawberry Shortcake o Peanuts -la marca de las tiras cómicas donde aparece "Snoopy"- facturó 13.000 millones de dólares. Mattel, el reino rosa de Barbie, vendió 9.000 millones de dólares en artículos de distintos tipos relacionados con esta muñeca, en 45 categorías diferentes, desde decoración del hogar, material deportivo o electrodomésticos. Sanrio Inc., la corporación de "Hello Kitty", esa gatita japonesa, facturó 6.500 millones de dólares en el 40.º aniversario del personaje. Y así suma y sigue. La división de artículos de consumo de la Warner Bros. facturó 6.000 millones con productos de los personajes que posee: Batman, Superman, Harry Potter o los de la trilogía de "El Señor de los Anillos", entre otros. También comercializa la serie friki por excelencia: "Big Bang Theory". Como novedad, este año ha entrado en la lista de las 150 licencias que más facturan un youtuber. Se trata de Bethany Mota (685 millones de visionados de sus vídeos), que con su colaboración con Aeropostale ha facturado 80 millones de dólares gracias a una línea de moda.
