Víctor García tiene grabados en su memoria algunos discos y canciones ajenos al heavy, que es donde finalmente desarrolló su carrera. Su oído se recreó con grupos ochenteros de base electrónica tal que "Ultravox" , "China Crisis', 'M. O. D'. o 'Depeche Mode', entre otros. Y no son referencias modestas. Cada cual imprimió una filosofía al mundo pop, con modos muy creativos. Alguno de ellos, como "Depeche Mode", sigue siendo una guía en el mundo del electropop. Y no digamos "Ultravox" (con quien Víctor García abre su "Top diez"), que alcanzó un grado sumo de originalidad, algo así como la electropsicodelia, especialmente en el trabajo elegido, "Vienna".
Con el paso del tiempo y los ajustes sonoros propios del transcurrir de la vida, Víctor García acabó haciendo cumbre en la escena heavy rock como voz de "WarCry", uno de los grupos asturianos de rock duro que han conquistado rotundamente mercados, público y a la crítica nacional e internacional.
Su banda sonora recorre grupos dispares y de distintos registros sonoros, léase "Chicago", que en los setenta mandaron un singular mensaje a la escena de rock. Era un grupo numerosísimo, lo que le daba un ambiente orquestal a todas sus canciones.
La memoria musical de Víctor García viaja también al heavy cristiano de "Stryper", y en su siguiente elección aparece entre sus favoritos uno de esos pelotazos que dejaron atónito el mercado, "The final countdown".
Otro fenómeno copó el ambiente desde los años ochenta: "Bon Jovi". Como explica el cantante de "WarCry" en su ansia por conocer "más sobre el mundo del heavy metal", caía en sus manos el tercer trabajo de esta banda. Se refiere al celebrado "Slippery when wet". Hay que sumar a estos impactos a "Manowar", que junto a los 'cristianos' "Stryper" los señala como una de sus grandes influencias, aunque comenzó a hacer sus pinitos musicales cuando escuchaba a "Blind Guardian".
En la recta final de su "Top diez" evoca a "Angra", donde descubrió el heavy melódico; prosigue con los ritmos italianos de "Rhapsody" y cierra el recopilatorio de su vida con la "E.L.O.", la única banda de rock progresivo (o así) que conectó con las radios comerciales y se infiltró en las pistas de discoteca; logros de Jeff Lynne, quien acabaría siendo uno de los instigadores de los "Traveling Wilburys" junto a Bob Dylan, Tom Petty, Roy Orbison y su gran amigo George Harrison.
Es la banda sonora que la voz de "WarCry" desvela a los lectores de LA NUEVA ESPAÑA. Una lista de reproducción que incluye algunas de las grandes perlas de los diversos movimientos del pop/rock. Mucho ritmo, mucha energía, mucha vida.
