Cannes (Francia) / Oviedo

Efe / Ch. N.

Tras echar un vistazo ayer a la prensa nacional y a la internacional, queda claro que Woody Allen es intocable, que Penélope Cruz puede haber hecho su mejor papel hasta la fecha y que el paisaje asturiano de «Vicky Cristina Barcelona» («VCB») ha maravillado tanto a los de fuera como la Barcelona de Gaudí. Oviedo, también nombrada «Ovieto» en algunos párrafos de la crítica de «Times», apareció ayer por todas partes en las críticas internacionales. Aunque Barcelona reina en el último filme del neoyorquino, parece que las imágenes rodadas en Asturias han impactado. Para empezar, como destacan todos los medios, en el viaje a Oviedo se concentra el nudo de la acción de esta tragicomedia alleniana, un destino que en la ficción de «VCB» se muestra como la meca de los placeres carnales. Richard Corliss, en la crítica de «Times» rescata las palabras con las que Bardem, en el papel de Juan Antonio, invita a las chicas (Vicky, interpretada por Rebecca Hall, y Cristina, Scarlett Johansson) a volar a Oviedo: «Allí comeremos bien, beberemos buen vino y haremos el amor».

En «Le Monde», que a pesar de su titular («La españolada de Woody Allen») indulta a la película en última instancia, también se habla de «las callejuelas de Oviedo». El «Variety» cuelga a la ciudad el adjetivo de «pintoresca» y el «Times» aplaude su «centenar de gamas de gloriosas tonalidades de terruño».

Casi toda la prensa coincide en que Woody Allen se aleja aquí de sus últimos trabajos y alcanza un punto equidistante, muy europeo, como impregnado de otro acento. El resultado es «ligero», pero es «Allen» y también aquí hay unanimidad, Penélope Cruz lo borda. Tanto que más de un medio la compara con la inmensa Anna Magnani en su interpretación de una española desequilibrada en constante tobogán emocional.

La actriz atribuyó ayer en Cannes, horas antes del estreno oficial, la brillante desmesura de la que hace gala en la película a la «genialidad» de Woody Allen. «Sólo cuando tu realizador es un genio te hace hacer cosas de las que no eres consciente», explicó la actriz española en la rueda de prensa previa al estreno. Flanqueado por Penélope Cruz y por Rebecca, pero no por Scarlett Johansson ni por Javier Bardem, Woody Allen volvió a explicar, entre otros aspectos del filme, cómo surgió. «Realmente, porque alguien de Barcelona me llamó y me preguntó si estaría interesado en hacer un filme en Barcelona, porque lo financiaría», explicó.

«Adoro Barcelona, mi mujer y mis hijos tenían ganas de pasar el verano en Barcelona, y escribí algo para poder rodar allí», dijo. En cuanto a «Vicky Cristina Barcelona», Woody Allen explicó que en esta cinta ha querido mostrar a dos jóvenes que van allí «y que poco a poco ven su mundo desintegrarse de manera compleja». Sin ser estrictamente trágico, matizó, quiso mostrar ese aspecto de la vida «de manera sutil».

«Le Monde»: «Los actores se revuelven dentro de sus corsés, hechos de clichés por las callejuelas de Oviedo».

«Times»: «Es una película visualmente enamorada de Oviedo, con su centenar de gamas de gloriosas tonalidades de terruño».

«Variety»: «Cuando Cristina dice que sí, el trío se marcha en vuelo privado a la pintoresca Oviedo».